RADIOGRAFÍAS – Dos mundos opuestos, hoy, están enlazados

RADIOGRAFÍAS

Dos mundos opuestos, hoy, están enlazados

NORMA SALAZAR

Antes de la conquista Anécdotas, sucesos y relatos Trilogía (2015) del autor José Antonio Crespo historiador, académico, analista político, sociólogo. En su primer título nos expone algunos puntos a reflexionar; en primer término un/a historiador/a nunca termina su viaje al pasado literalmente hablando, por ende, está latente el asombro a lo desconocido con todas sus causales. (Cristoforo Colombo), mejor conocido como Cristóbal Colón describe algunos nativos en su primer encuentro, aquí un breve ejemplo del capítulo I. El Descubrimiento

                               “Ellos andaban todos desnudos como su madre los parió, y también

                               las mujeres… y todos los que yo vi eran todos mancebos, muy bien

                               hechos de muy hermosos cuerpos y muy buenas caras… y todos de

                               buena estatura, gente muy hermosa… Y ellos ninguno prieto, salvo

                               el color de los canarios… las piernas muy derechas, todos a una mano,

                               y no barriga, salvo muy bien hecha.”

El descubrimiento de América contribuyó una ardua exploración al nuevo territorio, investigar y poblar el nuevo mundo por más de tres siglos en el cual saber al dedillo coexistió  en un ambiente totalmente hostil que emplazó España para tener poder y mano de obra para adquirir de estas tierras grandes riquezas. “Ya va el príncipe más joven, Cuauhtemoctzin, y va a entregarse a los dioses” Durante la conquista Anécdotas, sucesos y relatos.  En el apartado IX. La Gran Batalla

                                “Ya he hecho lo que soy obligado en defensa de mi ciudad,

                               y no puedo más, y pues vengo por fuerza y preso ante

                               tu persona y poder”

La literatura histórica narra que ocurrió altos índices de mortandad entre los aborígenes de la  Nueva España multiplicada por un lado por enfermedades desconocidas entre los años 1519 y 1640 ésta metrópoli prehispánica  se abatió casi un 90%, un total estimado de 25 millones, un infortunio demográfico fue secuela de una ristra de epidemias multianuales que se propagó: viruela (1520), sarampión (1531) en segundo  el “trabajo excesivo” de que fueron sometidos tras la conquista en  los primeros años de la Colonia. La corona Española  llevó a atesorar un oficio lucrativo con los portugueses: el tráfico de esclavos africanos. Un procedimiento provechoso  que no va a “destrozar” la unidad de la disertación historiográfica es apuntar el tema sobre la posición de los cronistas que estuvieron personalmente al tanto  de los entornos indígenas durante la conquista e inminentemente posterior de ésta. Claro ejemplo,  el  asombro del hábitat  americano como lo  relata La Historia verdadera de la conquista de Nueva España, Bernal Díaz del Castillo: “Las iguanas llamaron la atención de los hispanos, como es de suponer” Bernal  describe  “hechura de sierpes chicas”, agrega  “son muy buenas de comer” En este caso, leemos  una anécdota viva y de mucho asombro que para los presentes fue  un impacto. Asimismo, me parece provechoso no ajustar las imágenes  tan sólo en ciertas regiones territoriales de la Nueva España, déjeme  enfatizar, hay que prestar atención a todo un contexto cultural, histórico, social, económico, etcétera.

En  primer lugar el contacto para los nuevos pobladores fue impactante, susceptible  y de reconstrucción habitual, psicológica. Un nuevo pensamiento que   debieron  confrontar,  además representó un choque ideológico para la época concerniente. Lo explicó el biógrafo Gianni Granzotto: “La masacre de Navidad marcó un cambio radical en la historia de las relaciones entre europeos y americanos. Colón comprendió, inmediatamente… que terminaba la visión fabulada del buen salvaje y que la colonización de las nuevas tierras sería una dura conquista. Terminaba la pacífica exploración de los mares. La felicidad, el momento mágico del encuentro entre dos mundos había terminado con el fin del Fuerte Navidad”. Reitero, no era sólo un asunto de colonización-político sino también era de orden religioso y económico. Después de la conquista Anécdotas, sucesos y relatos capitulo XI. La Conquista Espiritual

                               “Los frailes en sus sermones persuadían a los pobres indios que

                               tomasen esas indulgencias, diciéndoles que con dar cuatro reales

                               por una misa, librarían del purgatorio aquellas almas… Arreglada

                               de este modo la renta de las bulas, produce anualmente al tesoro

                               más de tres millones de oro… últimamente (los indios) rehúsan

                               tomar bulas, porque ven que se convierte en un tributo anual…”

Las batallas contra los infieles durante la época de los Reyes Católicos eran destructoras mientras para los otros europeos lo veían con  ojos de  grandes cruzadas combatiendo contra indígenas muy infieles que realizaban sacrificios humanos unificados a la sodomía, la homosexualidad, el travestismo o la transexualidad que era aceptable en estos aborígenes, pero los nuevos ocupantes de la población cristiana no lo admitían sino que para ellos era descarrío que repelía a Dios.

Termino ávidos lectores no hay duda que son temas muy complejos para reflexionar en ésta travesía histórica en los rompecabezas religiosos, culturales, económicos, sociales, políticos, geográficos, es imposible asentar en una sola raíz indígena o su contraparte del origen hispano. La herencia que hoy se vive en tiempos contemporáneos tiene debates con sus causas pero no debemos olvidar los otros periodos relevantes de ésta nación: la época Virreinal, la guerra de Reforma y la Revolución, la Independencia sin perder de vista como lo vivió y escribió el filósofo, político, poeta y periodista, historiador mexicano Justo Sierra Méndez

 “Los mexicanos somos hijos de los dos pueblos y de las dos razas;

nacimos de la Conquista; nuestras raíces están en la tierra… de los dos

pueblos, aborígenes y  españoles; este hecho domina toda nuestra historia;

a él debemos nuestra alma”