Editorial

TANATOLOGIANDO – LAURA SALAMANCA L.

Posted on

TANATOLOGIANDO

LAURA SALAMANCA L.

LA DEPRESION Y EL ADULTO MAYOR

La depresión es uno de los principales síndromes geriátricos. Es una enfermedad crónica o recurrente que tiene consecuencias devastadoras en el adulto mayor.

Las personas mayores deprimidas, parecen tener una mayor susceptibilidad a las emociones, a las enfermedades crónico degenerativas y al deterioro funcional.

Algunas manifestaciones son la fatiga, el insomnio y la anorexia.
El envejecimiento de la población y la baja tasa de natalidad propician que muchos adultos mayores se encuentren solos y sin apoyo familiar. La transición demográfica que vive en México, ha provocado un incremento del número de adultos mayores. En el año 2000, el censo de Población y Vivienda Mexicano, informó que los mayores de 50 años de edad representan el 13.4% de la población y el Consejo Nacional de Población estimó que la cantidad de ancianos se duplicará en 2025 y representará la cuarta parte de la población en el año 2050. Sin embargo, mientras más edad algunas capacidades físicas se deterioran y los problemas de salud mental aumentan, por lo que la depresión es uno de los padecimientos mas frecuentes, discapacitantes y asociados a una alta mortalidad.

Esta enfermedad, se caracteriza por el sufrimiento del anciano y una considerable disminución de su calidad de vida, en esta enfermedad la persona experimenta tristeza profunda y la disminución de su interés para casi todas las actividades, lo que impacta en el desempeño social del individuo. Las mujeres son la más afectadas.

Las causas, son la disminución de la actividad de la serotonina y su unión con los receptores neuronales por lo que los adultos mayores parecen tener mayor susceptibilidad a las enfermedades por los cambios neurológicos, hormonales e inmunológicos. Los adultos mayores presentan insuficiencia de neurotransmisores a alguna infección subclínica o a la reacción de algún virus latente en el cerebro.

Además, la demencia, la enfermedad vascular cerebral y la enfermedad de Parkinson son patologías que afectan el sistema nervioso central y se asocian a la depresión en algún momento de la evolución de la enfermedad.

Las causas psicológicas son mas complejas que en edades mas tempranas. Errores cognoscitivos, psicodinámicos o de comportamiento pueden originar la depresión, junto con el número de eventos negativos vividos. La teoría psicodinámica propone que las pérdidas son inevitables durante el envejecimiento (pérdida de objetos, personas, de la imagen corporal, de alguna extremidad del cuerpo, etcétera) y por ello se desarrolla un síndrome parecido a la depresión que se llama síndrome de depleción, por otro lado los adultos mayores deprimidos pueden malinterpretar muchos de los eventos que ocurren en el transcurso de su vida, esta distorsión cognoscitiva ocasiona una respuesta exagerada a los eventos, además de la creación de expectativas no realistas y la generalización y personalización de las situaciones adversas.

El diagnóstico de la depresión es totalmente clínico y si se identifica en su inicio es totalmente reversible (aunque el síndrome de la depleción dificulta aún más su identificación).

La sintomatología afecta:

• La dimensión afectiva: llanto, tristeza, apatía etcétera.
• La dimensión cognoscitiva: desesperanza, negligencia, idea suicida, culpabilidad etcétera.
• La dimensión somática: cambio de energía, apetito, cambios en el sueño, la evacuación intestinal y de la libido, etcétera.

En personas mayores, los síntomas somáticos tales como la fatiga, el insomnio y la constipación son predominantes, aun no teniendo depresión.

Existen otros síntomas comunes como la magnificación de la percepción del dolor, los síntomas cardiovasculares o la pobre concentración.

La ansiedad y la somatización son sin embargo los síntomas más dominantes.

Artículo de medigraphic en línea de la Clínica de Geriatría del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, Ciudad de México 2006.

La emoción del aprendizaje separa a la juventud de la vejez. Mientras estés aprendiendo, no eres viejo Rosalyn S. Yalow

Los años arrugan la piel, pero renunciar al entusiasmo arruga el alma
Albert Schweitzer

lauhipnosis@gmail.com

Las más leidas

Salir de la versión móvil