Editorial
RADIOGRAFíAS – *RETORNO DEL ERMITAÑO
RADIOGRAFíAS
*RETORNO DEL ERMITAÑO
NORMA SALAZAR
¿Qué es la vida?
Lo invisible-visible, una sombra que marcha en recovecos desde lo hondo del ser vivo, pero existen otras vidas que son como desiertos, van a cuentagotas por naturalezas heterogéneas.
Tan sólo son ERMITAÑOS que contemplan el infinito de las dunas, el edén exuberante, los joyeles luminosos de las aureolas, torrentes de cascadas volatilizando brisas para los transeúntes.
La plácida gema en soledad es tregua para aquellos trotamundos del planeta en la compañía docta del crepúsculo van despojando a paso de tortuga la bitácora de sus días.
Al día siguiente el mayor gozo está en el ASOMBRO al sentir los primeros roces del Dios Dana en sus rostros para luego exhalar la vida del día no importa que puerto, cima, tal vez acantilado dispare a plomo el Belinus los ermitaños se paran firmes.
El hospedaje aguarda en cada paraje el dios Teutates cobija con su manto estelar.
EL BRILLO DEL CACHORRO
Huniberht agradece a la Terra, Aqua, Ignis y Aer por servirse de ellos en su larga travesía.
No olvida El Nudo de la Paternidad, al contrario lleva como laude incrustado a su espalda con la esperanza de leer su sonrisa en los aires venideros del norte. En su transitar escucha el latido de la fotografía candorosa que protege de los atemporales turnos.
Han transcurrido antiguos intervalos del aquél alumbramiento y fenecimiento que lo dejó tatuado en sus esencias corpóreas, por ello es su andar de ERMITAÑO, viaja acompañado de la fiel fotografía magenta cuarteada.
En otro lugar del planeta, lo espera Meredith, Guardiana del Mar, sabe que quedará seco por dentro.
Siempre llega puntual a la cita en cada desasosiego otoñal, esta presta para regar su corazón de aqua prístina y él pueda deslizar gotas savias en su rostro para el futuro reencuentro…
LA HIJA DEL ERMITAÑO
En éste mundo, observo el firmamento para encontrar una enorme antorcha que proteja el aposento y reiné la fronda de la noche.
¡Padre no sólo es tu travesía sino también la mía!, que cabañuela en mis atardeceres otoñales he aprendido a dominar la tenue y cómplice soledad en compañía de mí sombra.
He sacado la beldad de ti por amor a la Madre Tierra el carácter de mi madre con un corazón noble, en mi búsqueda a la deriva por el mundo huraño me sostiene la impecable fotografía de ella al lado de la tuya que vigoriza mis días existenciales al ver TU MIRADA que es MI FORTALEZA.
CANTAN TUS PASOS
Sé que tu andar por el mundo canta con sabiduría, yo en la lejanía escucho tus pasos a través de mis sueños.
*RETORNO DEL ERMITAÑO, Libro inédito
FOTOGRAFÍA: CLAUDIA SHAPIRO