Editorial

LAURA SALAMANCA L. – NEUROFISIOLOGÍA DE LA HIPNOSIS

Posted on

TANATOLOGIANDO

LAURA SALAMANCA L.

NEUROFISIOLOGÍA DE LA HIPNOSIS

 

El estado hipnótico es un estado intermedio entre la vigilia y el sueño, que dependiendo de la profundidad puede ir de leve a sonámbulo.

Existen varias clasificaciones, pero una de las más aceptadas es el leve, medio, profundo y sonámbulo.

El leve es aquel de los sueños en el que la persona puede estar con los ojos abiertos pero su mente ya está lejos, o en pensamiento o mirando una película, o leyendo un libro y si alguien le habla ud. ni lo escucha por estar absorto en lo que está soñando o está mirando, y está desligada por momentos del mundo. A esto se le llama atención concentrada, sin atención no hay hipnosis, de hecho, por eso una persona con déficit de atención no puede ser hipnotizada.

Hablando de estados cerebrales tenemos:

En vigilia predominan las ondas beta

En estado de relajamiento las ondas alfa

En el sueño las ondas tipo delta y teta

En estado hipnótico por ser un estado intermedio entre el sueño y la vigilia se procesa en la mayoría de los casos las ondas alfa, teniendo algunas excepciones en ondas tipo teta como en meditación profunda.

Los estados leve, medio y profundo son propicios para la psicoterapia, porque debe haber una conexión de la mente consciente con la mente inconsciente ya que ayuda mucho en el proceso terapéutico y es bien interesante como el paciente participa conscientemente y activamente en la mudanza de las emociones traumáticas.

El estado sonámbulo que solo ocurre en el 10 % de la población, es un estado en que las sugestiones son aceptadas sin filtro salvo si son contra la moral o contra los instintos de conservación de la especie.

Nuestro cerebro está dividido en dos grandes hemisferios, el derecho y el izquierdo unidos entre sí por un cuerpo calloso

El hemisferio izquierdo es responsable del análisis, por la parte racional matemática, la ciencia, y es el que lidia con la parte del adulto centrado en sus cinco sentidos, en todo lo que puede ver, oír, tocar, sentir y degustar.

El hemisferio derecho es el responsable de la síntesis, por la parte intuitiva y lidia bien con las artes, la filosofía, la poesía, la imaginación, la fantasía, los sueños y está más centrado en el sexto sentido.

En la actualidad precisamos más del izquierdo por el desarrollo de nuestra cultura tan terrenal con la sociedad y al contrario en las culturas primitivas y en los místicos está más desarrollado el cerebro derecho.

La excelencia de la vida se da por armonizar los dos cerebros, ya que para eso fueron creados, para trabajar juntos.

El ser humano que solo usase uno quedará fragmentado, y no alcanzará la plenitud, la felicidad

El mundo occidental exalta el cerebro izquierdo regido por la física clásica y el mundo oriental exalta el cerebro derecho regido por la física cuántica.

El objetivo es usar los dos ya que hay momentos en la vida en que necesitamos cada uno en particular

Desarrollar el cerebro izquierdo es seguir haciendo lo que nos enseñaron en las escuelas, leer analizar, criticar, usando siempre los sentidos.

Desarrollar el cerebro derecho es aprender a través del sexto sentido, por la intuición y por la meditación (la mejor forma para activar nuestro cerebro), por la poesía, la música, la escultura, la danza etc. Cuando nos entregamos con pasión a un determinado proyecto y dejamos fluir nuestra intuición, a veces contrariando a la razón, estamos desarrollando nuestro cerebro derecho

En estado de vigilia funcionamos con el cerebro izquierdo, pero cuando cerramos los ojos y relajamos nuestro cuerpo y empezamos a dejar que nuestra mente interior trabaje para nosotros, o sea que dejamos que nuestra parte creativa traiga la solución, estaremos activando nuestro cerebro derecho, luego el estado hipnótico empieza en el cerebro izquierdo y después al entrar en trance, pasa de nuevo al cerebro derecho a través del puente del cuerpo calloso.

En trance profundo hay una inhibición de los movimientos y del habla por la inhibición de las áreas cerebrales responsables por el movimiento, pues nos aproximamos a las ondas cerebrales del sueño.

En estados más leves esto no ocurre sin embargo la hipnosis sería una inhibición cortical difusa con un punto que es estimulado por nuestra voz. Esto nos hace perder el miedo a la hipnosis pues si el hipnólogo para de hablar, la persona puede adormecer o salir del trance espontáneamente. Normalmente el trance es inducido y tiene que ser mantenido por la acción de la voz. Y para salir del trance es solo dar la orden a su cuerpo para volver a la normalidad y esto se puede hacer en sesión con hipnólogo o en autohipnosis en casa.

 

 

Los cerebros no están diseñados para obtener resultados; van en direcciones. Si sabe cómo funciona el cerebro, puede establecer sus propias direcciones. Si no lo haces, alguien más lo hará”. Richard Bandler.

“Viajar te abre la mente como pocas otras cosas lo hacen. Es su propia forma de hipnotismo, y siempre estoy bajo su hechizo”. Libba Bray.

 

lauhipnosis@gmail.com

 

 

 

 

Las más leidas

Salir de la versión móvil