Internacional
Regresa izquierda al poder en Uruguay
La izquierda volverá a gobernar en Uruguay tras el triunfo del candidato Yamandú Orsi en la segunda vuelta de las elecciones que demostró, una vez más, que el país mantiene una solidez democrática considerada como una excepción en la región. Según analistas consultados por CNN, se trata de un cambio pero dentro del sistema político: es el regreso de una opción ya conocida a diferencia de la apuestas de otros países por outsiders.
Orsi, del centroizquierdista Frente Amplio y a quien el expresidente José Mujica presentó en campaña como su “hijo político”, superó al candidato oficialista Álvaro Delgado por poco más de 95.000 votos, según los resultados de la Corte Electoral cuando se habían escrutado el 100% de los circuitos el domingo a la noche.
Sin embargo, el país no tuvo que esperar a los resultados de la autoridad electoral para que el oficialismo reconociera su derrota: cuando las encuestadoras publicaron sus primeras proyecciones de escrutinio, que anticipaban el triunfo de Orsi, Delgado dio un claro mensaje de aceptación rodeado de sus socios políticos. “Uno tiene que respetar por sobre todas las cosas la decisión soberana”, dijo, agregando que ahora su contrincante tenía las llaves para “buscar y encontrar los acuerdos nacionales”.
Minutos después, Orsi salió al escenario y se comprometió a ser quien “convoque al diálgo nacional” en un mensaje en el que dijo que triunfó el país “de la libertad, de la igualdad, también de la fraternidad, que es nada más y nada menos que la solidaridad y el respeto por los demás”.
Orsi deseó “larga vida a los partidos políticos de Uruguay” y al “sistema democrático” en un discurso en el que también se refirió a aquellos que no apoyaron su candidatura: “Sigan abrazando las banderas de las ideas porque a partir del debate de ideas se construye una sociedad mejor, un país mejor y por sobre todas las cosas, una república democrática con futuro. No hay futuro si le ponemos un muro a las ideas”.
Para el politólogo Adolfo Garcé el mensaje de unión que plantea Orsi es creíble. “Orsi es de la escuela del Pepe Mujica, el Pepe Mujica que sí trató de unir, el Pepe Mujica que envejeció bien: dividió de joven, unió de viejo”, dijo en declaraciones al local Canal 12, destacando el papel de Orsi como “discípulo” del expresidente, quien estuvo muy activo —y no exento de polémicas— durante la campaña electoral.
Uruguay elige entre lo conocido
“La mayoría de la población mostró cierta disconformidad con el gobierno y buscó un cambio dentro de las opciones conocidas”, dijo a CNN Español el politólogo Daniel Buquet. Aunque no se trata de una mayoría holgada: el escrutinio muestra que Orsi obtuvo 1.196.603 votos y Delgado 1.101.185.
“En el sentido de la solidez del sistema de partidos y en el tipo de alternancia que se produce en Uruguay, creo que estamos en una situación absolutamente excepcional que se parece más a la de algunos países europeos con sistemas más consolidados como Alemania, incluso España, donde las principales alternativas son las mismas que había antes”, explicó.
En corto, “la gente busca un cambio pero no busca por fuera del sistema”, dijo, a diferencia de lo que ha sucedido en otros países de la región donde se han abierto camino outsiders.
En la misma línea fue el análisis del sociólogo y ensayista Felipe Arocena, quien dijo en diálogo con CNN Español que “el mensaje fue que el uruguayo decidió por una alternancia pero no por una alternancia de alguien que no conoce, sino una alternancia por una fuerza de izquierda que fue gobierno durante 15 años”.
“Uno puede pensar que Uruguay es un país tan pequeño (…) y entonces es muy sencillo mantener el juego democrático pero no es así, no nos confundamos, porque hay países tan pequeños como Uruguay que son totalitarios, que son dictaduras”, reflexionó, recordando que Uruguay es uno de los menos de 30 países considerados democracias plenas en el mundo, según el índice elaborado por The Economist.
Acento en las políticas sociales
El 1° de marzo de 2025, Orsi tomará el relevo del presidente Luis Lacalle Pou, quien llevó a la centroderecha al poder luego de una década y media de gobiernos de izquierda al mando de Tabaré Vázquez (presidente en los períodos 2005-2010 y 2015-2020) y Mujica (presidente en el período 2010-2015). Asumirá junto a Carolina Cosse, elegida como vicepresidenta, y con mayoría en el Senado pero no en la Cámara de Representantes.
Los cambios en Uruguay son graduales, dijo Buquet, por lo que no debemos esperar una modificación de los equilibrios macroeconómicos. “Los gobiernos del Frente Amplio han sido bastante ortodoxos” en cuestiones económicas, reflexionó, y analizando el equipo de Orsi y la situación global es probable que ahora lo sea aún más según su criterio.
“Los acentos van a estar probablemente en algunas políticas sociales”, opinó, poniendo como ejemplo la posibilidad de una mayor inversión en educación y ciertos ajustes en material de seguridad social como un posible incremento a los aportes que hacen los patrones.
Arocena, por su parte, considera que el gobierno se enfocará en intentar que el salario real no baje y en lograr una disminución de la desigualdad. “El énfasis de la centroizquierda está en la redistribución de la riqueza, creo que ese es el viraje más importante que podemos esperar”, resumió.
La plataforma de Orsi “se asemeja a la mezcla de políticas amigables con el mercado y programas de bienestar que caracterizaron el mandato del Frente Amplio entre 2005 y 2020”, dice el análisis de la agencia AP tras conocerse ls resultados. “Coincide en gran medida con su oponente en las principales preocupaciones de los votantes, como la necesidad de una reducción de la tasa de pobreza infantil, actualmente en un asombroso 25%, y la contención del recrudecimiento del crimen organizado que ha sacudido a la nación, considerada durante mucho tiempo como una de las más seguras de América Latina”.
Cómo se modifica el mapa de América Latina
Al analizar el resultado en clave regional, Arocena destaca que es necesario valorar cómo el Cono Sur —Argentina, Brasil, Chile, Paraguay, Uruguay— latinoamericano es “una región que se mantiene en el juego democrático hace bastantes décadas” pese a las diferencias entre los países que lo conforman.
Buquet, por su parte, prevé un “cambio en la orientación de la política exterior” aunque, como en el caso de la economía, no sea radical. “(El presidente de Brasil) Lula va a estar contento porque el gobierno del Frente Amplio va a ser un gobierno más amigo de Lula y por supuesto no cercano a (Javier) Milei, aunque igual va a tener relaciones perfectamente cordiales con Argentina también”, dijo reflexionando sobre el bloque del Mercosur del que forman parte los tres países. De hecho, está previsto que Lacalle Pou presente en sociedad su sucesor durante la próxima cumbre del Mercosur en diciembre, tal como lo hizo con él su antecesor, Tabaré Vázquez.
La Cancillería argentina publicó el domingo un mensaje sobrio felicitando “al pueblo uruguayo por su ejemplar jornada cívica” y “al presidente electo Yamandú Orsi por su victoria”. “Ratificamos nuestro compromiso de trabajar junto a Uruguay para fortalecer la agenda compartida y el bienestar de ambos países”, escribió en X.
Luiz Inácio Lula da Silva, por su parte, fue uno de los primeros mandatarios en publicar en redes un mensaje sobre Uruguay luego de que se conocieran los resultados. “Quiero felicitar al pueblo uruguayo por la realización de elecciones democráticas y pacíficas y, en especial, al presidente electo Yamandú Orsi, al Frente Amplio y a mi amigo Pepe Mujica por la victoria de hoy. Es una victoria para toda América Latina y el Caribe”.