General
Ramírez Marín continúa cumpliendo a los yucatecos
- Entrega una obra y apoya a deportistas en Acanceh
- «Cuenta conmigo», le dice un vecino de 87 años
Enterado de la visita del legislador a Acanceh, Anastasio Hoil Cen, de 87 años de edad, pidió a sus hijas que lo lleven al mercadito conocido como la “Placita”, para saludar al diputado federal Jorge Carlos Ramírez Marín, a quien conoció hace años en la “Casa del Campesino”, la sede de la CNC en Yucatán.
“Tengo más de 60 años en las filas del PRI, porque es un partido que está cerca de la gente y nos ayuda. Pedí venir para decirle que cuenta conmigo y que seguiré con mi partido hasta donde Dios me preste vida”, refirió el veterano campesino, con voz apenas audible, al estrechar la mano del legislador.
Auxiliado por su hija Oliva Hoil Díaz, Anastasio Hoil abordó a Ramírez Marín durante el recorrido que realizó el diputado, acompañado de la alcaldesa Guadalupe Zapata González, por la “Placita” para constatar la construcción del piso que le solicitaron, una obra que viene a mejorar el sitio de trabajo de decenas de oferentes. La visita fue el pasado fin de semana.
Lo que antes era un tianguis al aire libre, ahora es un mercadito techado, con piso, servicios básicos y en breve tendrá otras mejoras, en lo que constituye una muestra de la coordinación de esfuerzos que existe entre el Ayuntamiento y el legislador yucateco.
Bajo esa relación de trabajo, el diputado ha apoyado a Acanceh con pisos de concreto para familias de escasos recursos, gestionado acciones de vivienda y otros programas, y también ha ayudado a fomentar el deporte, entre otras acciones.
En otro sector de la “Placita” estaba Leticia Paredes Canché, madre de familia que organizó un bazar de ropa con la esperanza de recaudar fondos para la compra de los trajes de 17 jovencitos de la Secundaria Federal No. 13 de Acanceh, que desean participar en una comparsa en el Carnaval, que comienza el jueves 23.
“Nos juntamos varios padres de familia para hacer el bazar y ojalá podamos vender la ropa. Nuestros hijos quieren participar, están ensayando, pero nos falta para comprar los trajes. Creo que sí vamos a vender porque hay mucha gente en la Placita”, comentó Leticia, otra historia de vida de las muchas que hay en el mercadito de Acanceh.
En el recorrido afloró la generosidad del yucateco: en un puesto de comida le ofrecieron al diputado tacos de carne asada y de costilla que salían del carbón. Los oferentes conversaron con él durante varios minutos y se negaban a cobrar los tacos, pero finalmente aceptaron el pago.
“Estamos muy agradecidos con usted diputado por cumplir su palabra una vez más. Sus gestiones siempre nos ayudan a resolver las necesidades de la gente y sé que lo mismo hace en otros municipios”, indicó la alcaldesa Zapata González.
“Por eso siempre le he dicho que para nosotros no es un diputado federal, es un amigo de Acanceh y siempre será bienvenido. Me consta también que usted trabaja para todos, sin distingos de ningún tipo”, afirmó la presidenta municipal.
En la plática con los oferentes, Ramírez Marín respondió a sus preguntas, explicó varios temas, les preguntó también sobre aspectos de su trabajo y los felicitó por luchar todos los días para llevar el sustento a sus familias.
Se dio tiempo para conversar con ellos, compró algunas cosas, recibió unas solicitudes que le entregaron por escrito y obsequió granizados y tamalitos a un grupo de mujeres que lo acompañaba en el recorrido.
En la “Placita” recalcó que los municipios tienen un presupuesto limitado que les impide atender todas las necesidades, de allá que requieran el apoyo de las otras órdenes de gobierno y de los legisladores.