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Se evocan vivencias y emociones de convertirse en mamá
Las vivencias y emociones que experimentó María Teresa Méndez Castro al dar a luz a su primogénito fueron evocadas esta mañana en el marco del Día de la Madre, ante el monumento dedicado a esa figura, ubicado en el Centro Histórico de esta ciudad.
En representación del Gobernador Rolando Zapata Bello, el titular de la Secretaría de la Cultura y las Artes (Sedeculta), Roger Metri Duarte, encabezó dicha efeméride que desde hace 91 años organiza la Liga de Acción Social.
Ante autoridades, comunidad estudiantil y público en general, la oradora leyó su texto La maternidad y mis tres regalos, en el cual compartió las impresiones que tuvo durante su embarazo y al tener contacto con su primer hijo. Del mismo modo, narró lo que sintió cuando nacieron los siguientes dos.
En ese tenor, Arturo Iglesias Bermúdez, representante de la citada organización, destacó el papel de las mamás en nuestras vidas, al reconocer que guardan tesoros tan primordiales como los valores y son ejemplo de guía, seguridad y temple para la familia de la que forman parte.
En su discurso invitó a la concurrencia a dedicar más tiempo a las progenitoras en respuesta al mundo virtual que vivimos ahora. “Debemos dar más espacios de calidad para charlar con ellas y hacerles sentir la importancia de su existencia”, subrayó.
La ceremonia contó con la actuación de la Orquesta Típica Yukalpetén (OTY), que bajo la dirección de Pedro Carlos Herrera López interpretó el Himno a la madre, Flores de mayo, Plegaria a las madres, Sólo tú y Reina de reinas.
En presencia de Ofelia Bello Paredes, madre del Gobernador, y del rector de la universidad Modelo, Carlos Sauri Duch, el alumnado esta casa de estudios, así como de las escuelas “María González Palma” “Consuelo Zavala” “Eduardo Urzaiz Rodríguez” y “San Agustín” pronunció pensamientos acerca de la festividad.
Finalmente, acompañado del presidente de la Liga, Héctor Navarrete Muñoz, y la alcaldesa de Mérida, María Fritz Sierra, e invitados especiales, Metri Duarte depositó una ofrenda floral al frente de la referida estatua, donde se montó una guardia honor, para dar paso a que las y los estudiantes hicieran lo propio.