Editorial

Dengue Político: Maestro del engaño

Posted on

Dengue Político: Maestro del engaño

David  Alpízar 

Colaborador de La Verdad

 

Pues, vaya que el mosquitou, que picó a Donald Trump, venía bien cargado de dengue, pero no cualquier dengue, ni siquiera hemorrágico; parece ser una nueva variedad alucinógena y enloquecedora.

Parece ser que el mosquitou causante de tal delirio, tampoco es una especie común, parece ser una rara especie de mosquitou, que crece en las regiones pantanosas de Tabasco, ahí por Dos Bocas. Todos sabemos, la poca resistencia que nuestros vecinos del norte, tienen a la picadura del mosquitou, pero, este tipo de reacción, no tiene precedente.

Quienes crean que la locura de Trump, es solo contra el tomate de Sinaloa o el aguacate de Michoacán, pecan de ingenuos y desconocedores de toda la maldad de la que es capaz este señor, de carácter, más volátil que el queroseno.

Por otra parte, hay que reconocer que, es un gran maestro del engaño, pues, mezcla cuestiones comerciales, que inclusive dañan a la cadena de valor de productos muy populares entre los consumidores de Gringous; y ni que decir de los comercializadores fronterizos, quienes ya han puesto el grito en el cielo; con cuestiones migratorias con fines netamente electoreros, en busca de su reelección a la presidencia, del otrora, país más poderoso del mundo.

Quienes desconocen la estrategia petrolera de los EE UU, fácilmente se tragan el anzuelo. Pero, es bien sabido, que los gringos, quienes son dueños de las mayores reservas de petróleo en el mundo, prefieren guardar su petróleo para el futuro y mientras tanto usar petróleo de otras naciones, a quienes le compran al precio, que ellos mismos, como compradores, fijan, a pesar del sin sentido que esto representa.

En el caso de México, gracias a nuestros grandes administradores del pasado, que prácticamente acabaron, con casi toda nuestra capacidad de refinación; hoy nos vemos obligados a pagar en especie, o sea, con petróleo crudo, todos los servicios de refinación que necesitamos y de lo cual, somos dependientes.

Asimismo, la compra de otros productos mexicanos por parte de los gringos, está condicionada a que se mantenga este acuerdo petrolero. Pero, a un viejo loco, que hoy gobierna México, se le ocurre la aberrante idea de recuperar la capacidad de refinación, para luego decirle al vecino poderoso, que, si aún quiere nuestro crudo, el precio será más alto o se lo venderemos a otro comprador, dispuesto a pagar mejor, y la lista de espera, ya es larga. 

El desquiciado gringou, vía Twitter, lanza una amenaza contra todos los productos mexicanos, con la clara intención de desplomar nuestra moneda y meternos en recesión, y por poco lo logra; sin importarle que los residuos del bombardeo, le pringaran la corbata. Todo con tal de amedrentar al hermanastro menor (pues ya ni hermano) y de camino, ganar votos

Pero, la carta del viejito locuaz al endiablado energúmeno, no pudo ser mejor. Si bien, con algo de folklore, por aquello de los tuertos y chimuelos, básicamente le dice dos cosas: 1. NO TE TENGO MIEDO, BOCÓN; y 2. NI ERES EL ÚNICO, Y YA, NI EL MAS GRANDE, NI EL MAS PODEROSO. Ahora, los comedores de arroz y los tomadores de vodka, e inclusive otros, aparentemente aliados del tío Sam, quieren petróleo a mejor precio, y que ya no lo acapare todo el viejo barbudo, de la chistera de las barras y las estrellas.

Pues, ¡vaya dengue contagioso! Arden en fiebre, tiros y troyanos, o mejor diríamos, gringous y frijoleros.

El Mosquito. 

Las más leidas

Salir de la versión móvil