TANATOLOGIANDO – ¿LLEGANDO A LOS 100?

TANATOLOGIANDO

LAURA SALAMANCA LÓPEZ

¿LLEGANDO A LOS 100?

Existe una paradoja en la actualidad, por un lado, la ciencia está logrando que las personas se acerquen a los 100 años como expectativa de vida, por otro lado, los gobiernos no pueden concebir esto, no hay dinero que alcance y el otro es la ausencia de los niños que ya no nacen. ¿Será México un país de viejos en un futuro no muy lejano?

Las personas mayores o ancianos ya se les dejó de ver como sabios, como se hacía en algún tiempo, en los que los jóvenes tenían que observar, obedecer y escuchar por la sabiduría que ellos tenían, lo que ha traído como consecuencia, soledad y desorganización mental, donde se apaga el deseo de vivir y las enfermedades se han acrecentado, aunque hay mayor expectativa de vida, hay muchísima enfermedad y como atender esto. Mi particular opinión es que según las creencias, personas que a la fecha tienen mas de 80 años, no pensaban vivir tanto ya que en algunos casos, sus padres murieron a temprana edad y por lo tanto existe una falta de preparación para ello; simplemente piensan que están viviendo horas extras y que no se lo esperaban, a nosotros solo nos queda la idea  dé que al vivir tantos años como se espera, tenemos que empezar a prepararnos para llegar a esa edad lo mejor que se pueda, y eso se logra haciendo un plan de vida desde ahora, desde la edad que tienes actualmente viéndote a futuro, como una persona independiente, realizando todo aquello que te llena el alma (explotando tus dones) y creando una red de apoyo donde personas de tu misma edad puedan convivir en espacios recreativos, haciendo amistades de todo tipo y algunas en las que puedas confiar, encontrando personas afines donde la relación sea más estrecha, algo que no se logra con toda la gente que conocemos,  actualmente algunas personas de la 4ª edad, sufren de soledad y ese es uno de los mayores problemas por lo que surgen las enfermedades, personas mayores que viven con familiares en conflicto siendo involucrados en ellos,  la falta de actividad y de personas que giren alrededor de las mismas, teniendo que convivir con gente de diferente edad, va haciendo que la gente se aísle y se vaya despersonalizando, esperando que aparezca alguna enfermedad “de la edad” como la diabetes, hipertensión, cáncer, etc. como si fuera regla general que tienen que cursar por ella porque ya llegó la edad, autocompadeciéndose y sintiéndose como un estorbo tanto con la familia como ante la sociedad. Incluso algunas personas solo esperan la muerte. ¿Se imaginan que nosotros seamos parte de las personas que lleguen a los 100 años?

Pero sería espectacular que teniendo ese futuro prometedor, lleguemos  a esa edad riendo con amigos, en lugares públicos, caminando erguidos, quizás hasta tomando un trago, jugando algún deporte sencillo y viendo a nuestra familia como crece, disfrutado de la soledad de nuestra casa con un buen libro en la mano, escuchando buena música, pintando, etc. disfrutando de nuestra comida (uno de los placeres de la vida) sin estar preocupándonos que si puedo comer esto o aquello, dejando a un lado los medicamentos que funcionaron a algunos de nuestros familiares porque pensaban que en algún momento tenían que enfermar, pero que en realidad nosotros no necesitamos ya que comprendemos que asi como la muerte, la enfermedad, la ancianidad, la senilidad no existe, todo es creado por el hombre y conforme se va haciendo consciente de esto, la gente tiene menos miedo a vivir y por lo tanto, disfruta cada momento que tiene en sus manos sin preocuparse por lo que pasó o por el futuro que, si nos toca vivirlo será increíble, sin tener que dar molestias a nuestros hijos porque aprendimos como vivir sintiéndonos cómodos con nosotros mismos, sin someter o chantajear a nadie, solamente dedicándonos a cumplir nuestras propias expectativas de vida, hasta podemos tener una mejor relación con nuestros hijos que nos siguen viendo como los padres poderosos, que se valen por si mismos sirviendo de ejemplo para ellos mismos.  Y evitaremos el que nos tengan que atender porque son nuestros hijos, los que tienen que hacer un espacio en su vida, para poder dedicarlo a llevar a sus padres al médico cada mes y no siempre en una forma muy accesible, haciendo que personas mayores casi vivan en los consultorios médicos, día a día llenos temores y angustias y hasta acuden por medicamento para cuando salen de vacaciones “por si se enferman” programándose. Quitar eso de la vida de nuestros hijos equivale a llevar una mejor relación con ellos; Ganaremos más su respeto ya que verán que somos capaces de ser autosuficientes y ver por nosotros mismos. 

Habrá que cambiar la forma de pensar de esta nueva era, donde está en nosotros el tener una visión positiva de lo que queremos ver hacia a futuro con nuestra vida y salud, imaginando vivir muchos años más llenos de alegría y bienestar, con una red de apoyo bastante nutrida para asi contar con gente de nuestra edad.

• El hombre comienza, en realidad, a ser viejo cuando deja de ser educable. (Arturo Graf)

Lauhipnosis@gmail.com