Editorial
TANATOLOGIANDO – LA JUSTICIA
TANATOLOGIANDO
LAURA SALAMANCA
LA JUSTICIA
Es la más grande de todas las leyes, salvo el amor, el cuál no puede existir a menos que abarque la justicia.
La justicia demanda que por todo lo que es recibido tenemos que hacer una adecuada devolución en la medida que nos sea posible. Si recibimos (no importa lo que sea) la justicia demanda que hagamos una proporcional devolución, porque solo de este modo, nosotros podremos progresar. Esta ley, es la ley de todos los planos de existencia. En el Reino Físico, donde la devolución estrictamente material puede hacerse , cuando una persona por ejemplo ha recuperado su poder para ver u oír, o ha mejorado sus condiciones físicas, o materiales, innegablemente que esta persona debe devolver, hasta donde su comprensión lo permita, los beneficios que ha recibido, quizás hay mucho que pensar sobre esto.
Pero ¿cómo entonces podemos adecuadamente devolver lo que debemos al universo, a Dios y al hombre?
Hay solamente dos substancias que podemos usar en cualquier parte es (la ley cuaternaria) sabemos que, así como nosotros damos, así recibimos. Las dos substancias son:
- Substancia espiritual
- Substancia material
Vemos que existe en toda participación espiritual, una íntima alianza con la participación material y en toda participación material, un elemento de participación espiritual. El único camino por el que tú puedes devolver tales valores, es probablemente valiéndote de medios materiales … y así esta ley es tan absoluta que, aquel que ha recibido valores espirituales y falla en hacer su devolución en la misma forma, sencillamente se degrada a sí mismo.
La ley es que debemos hacer igual devolución.
Antes de que la tierra te dé, la abundante cosecha, ella pide que tú le pongas la semilla.
Nunca debemos aceptar nada, sin que hagamos la ideal devolución. La ley es que si nosotros recibimos beneficios espirituales y nos es posible devolvamos beneficios similares por ejemplo: una persona que va a cuidar a otra porque se encuentra enferma, de ninguna manera esto será pagado o devuelto con dinero, por la persona enferma, sino que en la medida en la que se presente alguna situación similar y cuando la persona se restablece y la persona que cuidó necesite este mismo beneficio ya sea para ella o para alguien de su familia, devolverle el favor es lo más justo, de la misma manera o sea con tiempo de calidad.
Esta es la razón por la que tanta gente en el mundo tiene tan poco, debido a que ellos han rechazado sistemáticamente el dar a todos, lo que ellos pueden dar y en su ignorancia y de acuerdo con sus ideas creen ellos que pueden realizar la armonía cósmica (la analogía según Platón considera lo que es justo para el hombre en un orden social de la ciudad) tratando de burlar la ley fundamental del universo, esperando siempre cosechar, sin mostrar la semilla.
Los valores espirituales son valores reales y estos solo pueden ser adecuadamente devueltos con valores reales por eso la frase tan trillada cuando has recibido un valor real y contestas solo ”que Dios te lo pague” no tiene ninguna importancia, porque tal pensamiento es generalmente hipócrita o tan débil que no tiene valor alguno, tal pensamiento no nos conduce a la acción, es abortivo y fútil.
Y siguiendo con Platón la justicia se refiere a la acción interior del hombre cuando este se rige y ordena y se hace amigo de sí mismo y pone de acuerdo sus tres elementos exactamente como los tres términos de una armonía; el de la cuerda grave, el de la cuerda alta y el de la media y dice que el hombre justo es aquel que usa su razón según los dictados de la verdad, que es fuerte y moderado en sus deseos.
Los dones que provienen de la justicia son superiores a los que se originan en la caridad
Khalil Gibran
La justicia, aunque anda cojeando, rara vez deja de alcanzar al criminal en su carrera
Horacio