Editorial

Profecía – Pedazos de Mí

Posted on

Profecía

Alegría Agosto

Pedazos de Mí

 

Tu bálsamo y mi fragancia tienen esencias cotizadas en quimeras.

Entre nosotros no existe parecido de emociones, ni una piel tendida, dispuesta, que empuje hacia dentro y sacuda mi vientre palpitante, pero aun así, no pude evitar comerte con los ojos.

Cuando te encontré el mundo dio un giro discrepante y desde entonces fuiste mi ilógica profecía.

Tuyo es mi cuerpo, mis trastornos, de otra son tus besos, el sustento.

Vives en la cabaña de su fuerza, en la prominencia de su plexo.

En la habitación a media luz, te espero, silueta reflejada en los eclipsados muros del instinto.

Es verdad que nunca despertaré profesándote un amor con olor a estreno, pues el plácido lugar que te reservo entre mis sábanas está vació de tu cuerpo.

Quizá vi en ti otro destino con mi nombre, con la exactitud de mi enseñanza, con la estación de mis motivos.

¿Es tu rostro, tu voz lo que despertaron mis arranques en cadenas, el misterio que me hace delirar en vano o quizá fue el beso dorado que trazó mi piel para ser inmortalmente tuya?

Cuéntame de ti, de lo que ignoro, sueño como que estamos juntos en la cálida noche abrazados y escondo entre mis cóncavos atajos las gotas perennes de tus mieles.

Sin murmullo bajo el talle tus suspiros, un beso cálido en el eclipse cuando el amor danza hechizado, cuando tu corazón prende el centro de mi gozo y el desván con rosas protege la furia de nuestro clímax.

No me despiertes, por favor, es el sexto día y como en el sexto no hay reposo, seguiré profesando que eres mío.

Las más leidas

Salir de la versión móvil