Editorial
La Contabilidad Energética (Parte 4) – La Lectura como Medio de Sanación
La Contabilidad Energética (Parte 4)
Eduardo Aguirre
La Lectura como Medio de Sanación
Con el permiso de sus rostros, de sus espíritus y del Universo les saluda una vez más su amigo Lalo Aguirre. Deseando que estén bien. Con gusto y alegría les damos la bienvenida a nuestra cuarta publicación de este espacio, “la lectura como medio de sanación”.
¡Aquí encontraremos cualquier tema que sane o ayude a sanar por medio de la lectura!
Continuando con el tema de “la contabilidad energética”, para lo cual les comparto los enlaces de nuestras publicaciones anteriores sobre el tema así los que recién nos leen pueden tener el contenido de completo.
A manera de recordatorio para retomar, les comparto que tocamos el tema sobre quienes o que somos (seres humanos), y que el ser humano está en un punto en el que requiere recordar su origen y esencia. Ya que ambas, esencia y origen han sido desvirtuadas, olvidadas o bien deformadas por diversas creencias e información que se ha ido adquiriendo a través de los años.
Esta situación es pues, una de las principales causas del actual caos y del desquebrajamiento del tejido social. Por ello decidimos tocar el tema a fondo y ver que hay más allá de lo que conocemos. A lo que de alguna manera concluimos que hay mecanismos invisibles que conforman al ser humano y en lo general le llamamos “el cuerpo energético”. Y que es posible tener cierto control o manejo del mismo, el poder hacer esto es súper importante ya que de ello depende en gran medida el éxito y la felicidad de cualquier ser humano.
Recordemos que el cuerpo energético del ser humano está compuesto de elementos como la información, el pensamiento, las ideas, las emociones entre otros. Concluimos que estos son invisibles y están compuestos de energía. Y que aprendiendo a ver (de algún modo) la energía es posible manejarla y poder tener injerencia en la manipulación consciente de la información y por ende también de nuestro destino, posibilitándonos así para crear nuestro propio camino. Esto se hace aprendiendo a maniobrar y usar nuestra “mente”.
Para lo que determinamos que esto se logra llevando un conteo de la energía positiva y negativa que entra y sale del cuerpo humano, esto se hace observando conscientemente a detalle la información que estemos experimentando. Y que para determinar que energía o información son negativas o positivas se usan mecanismos como las emociones y los sentimientos. Estos serán nuestros indicadores.
Los sentimientos son de alguna manera el efecto resultante de las emociones y para ello requerimos comprender que es una “emoción”. Para poder describir esto debemos analizar la palabra “emoción” en el idioma inglés, es decir “Emotion”. Ahora separemos esta palabra en dos partes que la componen, por un lado, tenemos la letra “E” la cual el significado es “energía”. Y la otra parte “motion”, la cual significa “movimiento” en español. Dándonos como resultado una fórmula: Energía en movimiento.
¡Eso es una emoción!” Energía en movimiento”, esta al recorrer el cuerpo (lo cual estoy seguro cada persona ha podido experimentar) hace contacto con millones de sensores (terminales nerviosas, glándulas, órganos y sistemas) los cuales reciben dicha energía y tienen una reacción, la energía viaja por la red nerviosa y los campos electromagnéticos hasta llegar al cerebro y demás órganos involucrados y provoca un efecto el cual denominamos como “sentimientos”.
Ahora bien, la energía que llega al cerebro es procesada por la mente la cual le da un cuerpo más tangible y la transforma en información, esta información la podemos catalogar y así poder determinar si es información sana o toxica. Para constatarlo es solo observando los detalles de la situación que le esté ocurriendo a la persona. Si la emoción, el sentimiento, la información interna y externa coinciden, estaríamos entonces corroborando sin duda a error que tipo de energía es. Es así como podemos catalogar la energía y saber si es positiva o negativa y es aquí donde ponemos en marcha el maravilloso mecanismo de “la contabilidad energética”.
La cual nos va a proveer la capacidad de elegir por qué camino vamos, es decir, si no nos gustan los resultados que estamos obteniendo debemos entonces revisar nuestra energía, la información interna y externa y tomar acción y conscientemente limitar la entrada de energía negativa e incrementar la positiva.
En nuestra próxima interacción veremos algunos casos concretos como ejemplo para ver en detalle cómo se lleva a cabo este ejercicio.
Recordemos que tal vez ahora que sabemos o que lo hemos recordado esto, pondremos especial atención en cuidar que no se desajuste el cuerpo energético con información negativa o nociva ya que esto podría significar el inicio de cualquier enfermedad.
Hasta la próxima, se despide su amigo Lalo Aguirre el Dragón Planetario Rojo 101 – Inlakech