Por: Ariel Avilés Marín.
Con verdadera sorpresa, me encuentro con que, una calle de nuestra ciudad lleva el nombre del Profr. Guillermo Vela Román. El asunto de esta designación no fue publicitado de manera alguna, no se anunció que hubiera una iniciativa al respecto, no se dio a conocer en qué sesión de cabildo se tomó el acuerdo de esta designación; en fin, el hecho consumado tiene un fuerte olor a madruguete.
¿Por qué hago estas reflexiones? Pues porque, ponerle a una calle el nombre de un ciudadano, tiene que tener una amplia fundamentación en acciones que hubiera realizado en bien de la sociedad, y en el presente caso, esta cualidad no se actualiza en hechos reales y concretos. No se mal entienda mi postura, no estoy descalificando al Profr. Vela como un hombre probo, honesto, decente y muchas cualidades más que lo caracterizaron en los actos de su vida, pero de eso a calificarlo como un prócer, un innovador, un luchador por los Derechos Humanos, dista mucho.
EL FRENTE CIVICO FAMILIAR…
El Profr. Vela Román, fue creador y líder de un grupo de la sociedad civil llamado “Frente Cívico Familiar”, y las acciones que emprendió desde esta trinchera de lucha son muy legítimas y honorables, pero se circunscriben a defender los intereses de un partido político, el PAN, y no de la sociedad entera. Creer en los principios de un partido político y defenderlos a capa y espada, es muy loable, pero esos intereses no son los de la sociedad en su conjunto.
Nuestra ciudad no se caracteriza por que sus calles lleven nombres de personajes ilustres, es más, son bastante escasas las calles que llevan nombres de ciudadanos ilustres, y en todos los casos hasta hoy, se había designado a gente cuyos méritos llegan a todos los meridanos, sin excepción alguna.
BARRERA VAZQUEZ, CANTO SOLIS Y DIAZ BOLIO…
Tenemos los casos de Avenida Alfredo Barrera Vázquez, quien fue un notable filólogo e historiador, fue reconocido por la UNESCO, un verdadero orgullo yucateco. Avenida Miguel Canto Solís, un deportista ejemplar que puso el nombre de Yucatán en boca del mundo y estableció un récord no igualado de defensas de su título mundial.
Avenida José Díaz Bolio, un poeta, arqueólogo y periodista, cuya acción está presente en nuestro Escudo Nacional, que fue reformado en 1968 a su iniciativa, y se puso en él una serpiente de cascabel por su argumentación al respecto. Avenida Rómulo Rozo, la calle que parte del Monumento a la Patria lleva su nombre, pues es el autor de una obra emblemática de nuestra ciudad.
Avenida Remigio Aguilar Sosa, en la Colonia Alemán lleva el nombre de este notable educador, que desde la trinchera de la educación pública formó a muchas generaciones de niñas y niños yucatecos. Como puede verse en los ejemplos citados, las acciones de estos célebres hijos de Yucatán, abracan a la colectividad toda, sin exclusión de nadie.
Si analizamos objetivamente la personalidad y acciones de Guillermo Vela Román, concluiremos que, era un buen hombre, un hombre honesto, un militante político vertical e incorruptible. Luchó denodadamente por los ideales en los que creía. Estas acciones están circunscritas a un solo campo, las luchas e intereses del Partido Acción Nacional, y esto no significa de ninguna manera una lucha por la sociedad toda.
LUCHAS PARTIDISTAS…
Las luchas por los principios de un partido, una facción política, cuales quiera que estos principios sean, no se extienden a la sociedad toda, no. A contra parte, hay otras gentes, que luchan por otros partidos, por otras aspiraciones políticas, y sus luchas son tan honorables como las de Guillermo Vela, y no se justificaría tampoco que, a cada uno de estas mujeres y hombres se impusiera su nombre a una calle, como no se justifica en forma suficiente haber impuesto el de Guillermo Vela Román a una calle de Mérida.
En un futuro, un niño, en su clase de civismo, preguntará a su maestra o maestro ¿Quién fue Guillermo Vela? ¿Por qué lleva su nombre una calle? Y ¿Cuál será la respuesta a estas preguntas? Fue un gran militante del panismo. Defendió los intereses de un partido político. Esas respuestas no son argumento suficiente para haber impuesto su nombre a una calle, que es del uso de todos los habitantes de la ciudad, sean estos panistas, priistas, perredistas o morenistas.
SOLIDAARGUMENTACION…
Las designaciones de calles, parques, escuelas, o cualquier espacio público, con el nombre de un personaje histórico, artista o un ciudadano distinguido, requiere para su aprobación, de una sólida argumentación que se expone en sesión pública de cabildo y se somete a votación de este cuerpo colegiado.
Sería muy sano que el cabildo meridano diera a conocer los sólidos fundamentos en los que basó la imposición del nombre del Profr. Guillermo Vela Román a una calle de Mérida. Llama la atención que, a contra parte, una sección de la avenida principal de Jardines de Mérida, que en sesión de cabildo, bajo la presidencia municipal del Ing. César Bojórquez, fue designada como Avenida Lic. Gonzalo Cámara Zavala, cuando fue develado el busto del prócer del civismo y la educación de Yucatán, y de pronto, sin causa justificada, se retiraron los letreros con su nombre y se pusieron otros con el nombre anterior Avenida Yucatán.
¿Qué sucedió en este otro caso? ¿Por qué se retiró el nombre aprobado en sesión pública de cabildo? Son cuestionamientos que nuestras autoridades tienen que responder de inmediato. Por de pronto, en el caso presente, nos encontramos con una designación hecha a la ligera y sin sustento y el cabildo de nuestra ciudad nos debe una explicación al respecto sin dilación alguna.
Mérida, Yuc., a 16 de octubre de 2021.
Ariel Avilés Marín/ Dahemont/ Agencia DHM/NEWS…
