LEÓN DE ALMEIDA, UN ARTISTA QUE SE DESLÍE EN PALABRAS Y VERDADES
ENTRE PAUSAS
GABRIEL AVILES
Hace unos días tuve la oportunidad de entrevistar al escritor León de Almeida al cual conozco desde hace más de dos décadas, en esta charla, platicamos de su trabajo y su amplia trayectoria, a continuación, les transcribo este dialogo con un artista que vive en realidades alternas para alcanzar y redactar un buen texto.
León, ¿cómo surge en ti la necesidad de crear poesía?
Mi gusto por escribir poesía surge como una forma de expresión que me agrada más que por una necesidad, como un impulso de creatividad. Empiezo a escribir a principios de los ochentas, como a las 13 o 14 años.
¿Quiénes son tus mentores?
Mis mentores son los creadores literarios, principalmente, los poetas franceses del siglo XIX como Rimbaud, Boudelaire, podría mencionar muchísimos porque también tengo a escritores más contemporáneos como Federico García Lorca, Andre Bretón, en fin son demasiados, pues gracias a esas lecturas empiezo a escribir de forma autodidacta.
Mi creación literaria se ha basado en temáticas que me han gustado o me han interesado, eso serían mis mentores, mencionar algunos y no a todos sería discriminatorio de mi parte, sin embargo, he de confesar que he leído de todas las ramas de la literatura y eso me ha dado más fuerza para escribir. Asimismo, me agradan corrientes como el surrealismo, la lírica de los poetas malditos, lo anterior, puede verse, hasta cierto punto en mi trabajo.
¿Qué tipo de textos manejas?
He procurado siempre mantener mi originalidad, ese ha sido mi enfoque más preciso, que mi poesía no tenga similitud con nada, no se parezca a la de otros, la originalidad es la bandera enarbolada desde siempre; obviamente, el lenguaje que manejo.
El tipo de poesía que escribo es surrealista, me gusta escribir de cosas que no formen parte de la realidad con originalidad. La originalidad es mi constante.
Vestigios de Maleza fue tu primer libro editado, ¿qué aporta a la literatura, este poemario?
Vestigios de Maleza ha sido una obra muy querida, muy amada por trascendental, tú, creíste en ese trabajo, lo consideraste apto para publicación y así se dio. En esa época (1998) hubo un boom de escritores en nuestra ciudad que prometían mucho, sin embargo, fue sólo un chispazo en el macro cosmos de la hoguera literaria.
Vestigios aporta mucho tanto por el lenguaje que uso como por su fondo y la estructura que se maneja en el poemario; por razones económicas quizá no le dimos la presencia que se merecía, este libro es un parte aguas que espero se complete más adelante en una próxima edición donde se incluyan poemas que no pudieron imprimirse en ese primer momento.
Agradezco mucho, esa oportunidad, fue mi lanzamiento con el pie derecho y aporto mucho, sí, porque la presentación la hicimos en un gran lugar como el Museo de Arte Contemporáneo de Yucatán (MACAY) con la presencia del Colectivo de Artistas Independientes al cual pertenezco y estuvieron presentes personalidades de ese ámbito.
Gracias a ti, que fuiste editor de bastantes autores por medio de la editorial Presagios, extinta desde hace una década, y que ahora, estamos tratando de revivir y sino de revivir, de renovar por algo más interesante.
Sé que no sólo escribes poesía también eres un escritor que se ha entregado a todos los vértices de la literatura, háblame de ello.
Yo abarco todos los géneros en su totalidad porque amo a la literatura. Respecto a tu pregunta, la dramaturgia es para mí, un ejercicio de expresión que ejercita a los escritores, básicamente hacia las demás áreas como el cine y los medios audiovisuales actuales.
Por ejemplo en dramaturgia, ahora estás en la promoción de la obra Lirios y Escorpiones. ¿Cómo surge este proyecto. Cuál es su argumento, de qué trata, y su fin último en qué reside?
Ahora que los mencionas tengo la adaptación de la obra de teatro Lirios y Escorpiones de 1994, que surgió de la interrogante: la utilidad de la poesía en la vida cotidiana del ser humano, es un debate de la utilidad del arte en la cotidianeidad; el lirio representa la creatividad y su contraparte es el venenoso escorpión que fustiga en forma peyorativa la utilidad de la creación literaria para subsistir o vivir; el lirio es el que engrandece la posibilidad de la literatura y hace que todo lo material desaparezca.
De hecho, esta obra ya fue publicada en parte, gracias, al apoyo de la escritora Melba Alfaro y ahora es una propuesta audiovisual que es proyecto del proyecto que conforma La Estepa Sangrante.
¿Cómo ha reaccionado la gente a tu trabajo lírico, tomando en cuenta que a finales del año pasado publicaste tu segundo poemario, La Estepa Sangrante, cuéntame un poco de esa nueva aventura literaria?
La Estepa Sangrante es un libro impreso, un compendio de poemas que abarcan la etapa de Lirios y Escorpiones y de Vestigios de Maleza, con otros de más reciente creación y su temática es el transito doloroso del ser humano por la tierra que es La Estepa Sangrante donde todos somos unos lobos esteparios caminando con valor por la vida.
También confío hacerlo más adelante en forma audiovisual porque el libro impreso está en agonía, no porque yo formule esta sentencia, el libro impreso ya no tiene el poder de antes, de abrirse camino sólo por ser un libro, actualmente, hay que usar la tecnología como un medio para tener nuevos lectores.
Este libro nace de una temática muy profunda y con un lenguaje que no es masivo pero que tiene un gran valor literario. Respecto a la respuesta de los lectores, no la sé pero confío que la entiendan y valoren el trabajo creativo.
¿Qué proyectos tienes en la actualidad?
El proyecto editorial La Estepa Sangrante que estamos haciendo un servidor, Sandra Valarezo y tú es con la finalidad de abrir nuevos caminos para la lectura por medio de la tecnología. Sandra edita, Gabriel y yo estamos al pendiente de los textos y de todo lo que se necesita para que se realice un video con un contenido audio visual interesante.
A partir del 6 de julio se comienza la promoción de Lirios y Escorpiones, ya tenemos un espacio, sin embargo, ya tenemos, charlas con otros recintos culturales para presentar esta propuesta.
Así con esta pregunta, damos por finalizada esta conversación que me dio la certeza que estoy ante un escritor que vive para la literatura y la literatura para éste.
