GONZALO CELORIO Y DE LA CARRERA DE LA EDAD DE IDA Y DE REGRESO
RADIOGRAFÍAS
NORMA SALAZAR
Gonzalo Edmundo Celorio Blasco es un novelista, ensayista, crítico literario, académico mexicano. A partir de febrero del presente año se desempeña como director de la Academia Mexicana de la Lengua. Su vasta obra es reconocida, preferentemente enaltece el asombro a través de la vocación literaria con su innato estilo qué lo define nos transporta a sus primeros cuatro decenios de vivencias intensas. La lectura de un ensayo es un testimonio que reabre puertas y ventanas para narrar aquellas frescas imágenes, del viaje sedentario (1994) que se refiere al barrio de Mixcoac en la ciudad de México, nuestro autor vivió durante veinte años y lo escribe en el tomo De la carrera de la edad I Ida, escritos muy juveniles y entusiastas tan personales y evocativos; La Casa
“Construída a finales del siglo XIX, la mía es una de las pocas casas de ladrillo y petate
-otrora tan características del barrio de Mixcoac- sobreviviente de la voracidad comercial
y de la explosión demográfica que convierten las casas antiguas en establecimientos
mercantiles o edificios multifamiliares.”
De la carrera de la edad I De ida no hay duda que no habrá otra biografía ni modelo con un toque proustiano, sí, todo contexto es un pretexto puede estimarse que los mismos manuscritos de Celorio son la integridad pura de buenos tiempos, un trabajo de suma importancia entre narración y ficción, una lectura no estética considerablemente porque está narrado por lo emocional que llega a sus puntos culminantes. A propósito de la cualidad de Flaubert centraliza en una representación de la situación del tiempo y su invasión sorpresiva en La educación sentimental cuando Fréderic Moreu resucita parte del pasado lo que señala Flauber es lo más cotidiano de la vida, para él es lo fundamental. Este libro es una serie de tragaluces en el cual los lectores pueden asomarse a ensayos descriptivos de la obra de Celorio. Podrá leérselo del principio al fin o del fin al principio. La puesta en crítica de las generalidades del lector alcanzará sólo verificar con los bocetos que el mismo novelista nos dejara como un sendero formal ante la implacable tensión del recuerdo tan vivo, como leemos; México, ciudad de papel en El Jardín
“Tristeza sí, lástima también. O coraje. Pero no sorpresa. ¿A quién pudo
haberle sorprendido la desaparición de El Jardín? No pertenecía, desde
hace tiempo, ni a su tiempo ni a su espacio. Era un reducto silencio y solitario
enclavado en el ruido tumultuoso de la avenida que -ironías de la nomenclatura-
leva el nombre de La Paz, donde la voracidad mercantil ha convertido cada
casa en restaurante, cada cochera en boutique o en comercio de nombre
apostrofado y cada patio en estacionamiento”
De la carrera de la edad II De regreso ambos libros editados por el Fondo de Cultura Económica congrega la literatura hispanoamericana, cabe subrayar que en este tomo II integra una amplia selección cuyos temas aporta la indiscriminación, la crítica, el homenaje; Ensayos de Contraconquista (2001, una docena de estudios alternan la narrativa hispanoamericana de la segunda mitad del siglo XX, podemos examinar novelistas como José Lezama Lima, Alejo Carpentier, Mario Vargas Llosa, Carlos Fuentes, Julio Cortázar, Gabriel García Márquez entre otros afines narradores; Ensayos de Contraconquista hasta cierto punto un microcosmos tan actual que podemos constatar en uno de los capítulos de este tomo II, me refiero a Julio Cortázar, Pudo más el cronopio que la fama Cortázar escribió una literatura atribuida de sarcasmo e ironía que esconden entre líneas reflexiones filosóficas con un lenguaje llano y vertical, una obra fiel, el instinto de la sociedad del santiamén –adaptable a todos los tiempos- una ridiculización de contextos habituales e iterativos que nos obligan a reflexionar sobre actos que consideramos habituales y a los que normalmente no prestamos atención como lo demuestra el académico Celorio en: El mismo desprecio por casi las mismas cosas los textos versan aquí en torno a la ponderación de las «cualidades» y «actitudes» que acogen las familias frente al ficticio social, a su vez, sobre todos los roles que demuestran sus miembros en dicho organismo.
“Se trata de una profunda exhortación al juego –sus instrucciones, si se quiere-,
entendido como disposición para negar el hábito que todo lo lame hasta darle
suavidad satisfactoria; como solidaridad con un piso de arriba donde vive gente
que no sospecha su piso de abajo, como vocación para romper el ladrillo de
cristal que al preservarnos nos aprisiona y nos aísla”
Por último cierra este segundo volumen Avatares de la literatura cubana estricta labor por la literatura cubana, también Celorio examina a ilustres miembros de la Academia Mexicana de la Lengua: Hugo Gutiérrez Vega, José Luis Martínez, Antonio Alatorre, Margit Frenk, Rosa Beltrán entre otros destacados escritores.
