Muerte Súbita
Olivia Peón Cardín
Sinalefa de Mujer
Dantesca oscuridad donde antes luz había,
lleno de sombras silenciosas llegan
hundidos y desnudos los naufragios
que volvieran la tierra en inframundo.
Desolación, orfandad, y embriaguez
se desprenden de cuerpos putrefactos,
como sangre que enmudece con el viento
lapidando las fosas de los hombres.
Cadáveres vacíos, tristezas en los ojos,
donde se mira yerme al amparo del frío,
donde se pise hiere
como un hierro fundido.
Azotes de los Dioses
que antes amaban a la tierra
dónde verde follaje había crecido
ahora se extrae el éter de la muerte.
Flota un abismo sepulcral de peste,
como una enfermedad roe por dentro,
es de la espada que atraviesa fuerte
el corazón que gime desangrado y ruino.
Y no perdonan deidades tal ofensa
que erotismos del hombre han avivado
frente a la lucha del poder supremo
dejando la natura en indigencia.
