NO ANOCHECE
A PULSO DE TINTA
GABRIEL AVILÉS
presagiodemar@gmail.com
No anochece y
En tus ojos
Se refleja la austeridad del tiempo
Lluvia y tierra
Difuminan el agónico cansancio
De las luciérnagas
Deambulando por cornisas, así
Esconderte de la muerte y su asfixia
Todavía no anochece
El atardecer se filtra por ventanales
No es hora de dormir
Sino de contemplarnos como niños
Suspendidos por el alba
Sombra mía
Cuando anochezca, no temas
A tu lado y en tu abrazo
Por siempre cerraré mis ojos
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Estoy cansado, fallezco cada mañana, recorriendo las mismas calles, de saludar al hombre de las manos sucias, ver caer de los árboles, sus solsticios, ocultar mis lágrimas por sumideros.
Cansado de vivir sin vivir, de ladrar mis penurias a través del verso sagrado.
Pariendo líneas con más pena que gloria y sentirme pusilánime en el transcurso de las horas mientras mi mente añora su cadáver.
