Editorial

EL ARTE Y EL TURISMO INCLUSIVO – A PULSO DE TINTA

EL ARTE Y EL TURISMO INCLUSIVO

GABRIEL AVILÉS

A PULSO DE TINTA

presagiodemar@gmail.com

El turismo inclusivo ha usado las herramientas a su alcance para que las personas con discapacidad tengan un trato igualitario y digno, sin embargo, desde mi punto de vista, se han olvidado un poco de las diversas manifestaciones artísticas como la pintura, la escultura, la música, entre otras, como un plus alternativo para los turistas con alguna discapacidad.

El arte puede generar una mayor afluencia de visitantes con discapacidad a los diversos polos turísticos, en este caso, me remito a Yucatán donde la industria hotelera puede ofrecer exposiciones, talleres, lecturas y actividades culturales enfocadas a los turistas con discapacidad, generando una buena derrama económica pues sería un agregado a los servicios que ofrecen al formar parte del turismo incluyente pues a todos los seres humanos nos mueven las emociones y eso es el arte: emoción; además, el arte no discrimina a nadie, al contrario, vincula al ser humano con los prodigios del mundo.

Lo anterior también lo señala José Pablo Salazar, consultor en temas de discapacidad del Banco Interamericano de Desarrollo, el cual, apunta:

“El arte es fundamental para la inclusión social, ya que es parte de la cultura popular, lo que construye la narrativa de lo que somos”.

Buena sinergia es el Turismo Incluyente y el Arte, sinergia que puede dar como resultado: exposiciones pictóricas con técnica al relieve o muestras escultóricas donde las personas con discapacidad visual puedan sentir lo que el artista ha creado, asimismo, editar libros en braille sobre la cultura maya para que se permeen de la historia del estado.

Otro ejemplo, dar explicaciones por medio del lenguaje de señas, al recorrer los sitios más representativos del estado, también se podría efectuar un espacio de cuenta cuentos con las leyendas más interesantes de la mitología mayense, entre otras alternativas que pueden ofrecer un deleite para la persona con discapacidad auditiva.

Por otra parte, los hoteles podrían generar talleres para personas con discapacidad a fin de desarrollar el lado creativo de estos, obviamente, con un personal capacitado para atender sus necesidades. Este personal pueden ser los mismos artistas de la región a quienes se les podría dar un curso para acercarlos a los individuos con los cuales interactuarían en la enseñanza.

Lo interesante de esta iniciativa sería comprender la discapacidad por medio del arte, alejado de estereotipos y dar a los visitantes con discapacidad y sus acompañantes, otra opción para disfrutar de los distintos destinos turísticos complementando las actividades turísticas enfocadas al entretenimiento con los vértices del arte, comprometiendo al sector hotelero y a los grupos culturales a trabajar en conjunto por un bienestar común llamado: Inclusión.

Bien escribió Frida Kahlo:

«Pies para qué los quiero, si tengo alas para volar”. …

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