TANATOLOGIANDO
LAURA SALAMANCA L.
LA FAMILIA CUNA DEL ALMA O DEL EGO
La fuerza viene de los padres y se transmite a los hijos.
Los problemas financieros y de salud, tienen que ver con las historias, los miedos, los complejos, inseguridades, intolerancias, tienen que ver con la independencia financiera, por la historia interna.
Nadie nos enseña a activar nuestro empoderamiento, ni a descubrir nuestros talentos, sino nos enseñaron a depender de algo o de alguien
¿Cuánto cuentas contigo? Depende de tu historia
Como buenos padres nos toca amarlos con conciencia y activar sus botones de empoderamiento
Alejandro Jodorowsky afirma que la familia nos afecta más de lo que pensamos.
Existen los mensajes parentales que son los que transmite la familia sin decirlo.
El subconsciente familiar se trabaja con Psicogenealogía y Constelaciones Familiares y estas terapias pueden llegar a sanar, depresiones, obsesiones, enfermedades, accidentes, pérdidas, alianzas, crisis financieras, muertes, secretos de familia arraigados por generaciones, creencias o mandatos, lealtades, dolores, sacrificios, etc. Por estas situaciones en la actualidad, las cosas no están funcionando bien.
Pero como plantear lo que te disgusta sin tener que pelear, agredir o huir, porque nadie nos enseñó a negociar.
Para que exista un verdadero hogar hay que ajustar tiempo, para irlo formando dia a dia. Sin embargo, muchos hombres no identifican cual es su fuerza y entonces la mujer asumirá el rol de la fuerza masculina, al comenzar una relación ya sea de pareja o matrimonio y donde no se pongan claras las reglas, después ya no se podrá exigir tomar el rol que le correspondía y no se darán cuenta que el otro existe, dejando de tomar cada uno su 50% de responsabilidad y eso crea las causas y condiciones de que ocurra algo negativo (problemas, divorcio, separaciones, etc.) entonces los hijos al no ver un sistema armonioso, sino solo en crisis terminaran presentando enfermedades. Ya que los hijos necesitan tener el 50% del amor del padre y el 50% del amor de la madre.
En todo clan hay jerarquías y se debe dar el lugar que corresponde, con respeto y honrándolo.
La confluencia del energia femenina y masculina es lo que hace un hogar, y para tener unos hijos centrados tenemos que tener en claro la direccionalidad, el rumbo, asumir los roles y las funciones de cada integrante de la familia, quizás ese sea uno de los problemas actuales ya que los niños no están siendo criados por sus padres sino por sus abuelos y en muchos casos por personas externas a la familia y los hijos crecerán con una confusión de los roles.
La energia masculina da:
Seguridad y Protección
Orden, sin orden no se puede crear un hogar
Fuerza Física, para el trabajo
Jerarquía y Respeto, haciendo un frente común y no rebasar la orden del otro, reconociendo su importancia
Limites, que es lo que hace crecer el amor en la familia
Democracia, otorgar liderazgo a la pareja de lo que ella considera que sea mejor
Líder Razonable
Autoridad
Espíritu rebelde, inspirado por su mujer
Su función es poner limites al EGO y exaltar el SER
La energia femenina da:
Arraigo, lo hijos por instinto quieren su nido
Estabilidad, con pocas cosas ser felices lo más importante es el hogar con amor
Amor, Calidez, Ternura lo que el hombre desea ver cuando llega a su hogar
Pertenencia conservación
Identidad amor incondicional libre para poder dar a los hijos y protegerlos
Alegría
Si el hombre no tiene la fuerza, se conformará con ser controlado, por buscar a la mamá inconscientemente
Código del hombre (fuerza de avance)
Diseñado para servir y proteger a su familia y a cambio pretende ser lo más importante para esta, aparte debe ser inspirado por su mujer.
Código de la mujer (fuerza de contención)
Diseñada para ser protegida, teniendo instinto maternal y permitiéndose ser tratada con amor, sirviendo a su familia sin ser utilitaria, ni servil. La honra debe ser reciproca.
El dar el apellido del marido a la esposa, es porque cuando se forma un clan, hay necesidad de coerción y pertenencia.
“El vínculo que te une a tu verdadera familia no es el de la sangre, sino el del respeto y la alegría que tu sientes por las vidas de ellos y ellos por la tuya”
Richard Bach