El huracán Enrique continuaba este lunes su avance sobre el Pacífico, en paralelo a la costa de México, provocando fuertes vientos y lluvias, informó el Centro Nacional de Huracanes (NHC) de Estados Unidos.
Enrique se mantenía en categoría 1 (de 5 en la escala Saffir-Simpson) y se ubicaba 105 kms al oeste de Cabo Corrientes y 430 kms al sureste de Cabo San Lucas, con vientos máximos sostenidos de 140 kms por hora y una velocidad de desplazamiento de 7 kms por hora.
«Un giro hacia el noroeste se espera esta tarde y se pronostica que dicho movimiento continúe durante los próximos días», indicó el reporte del NHC este lunes.
El Centro prevé que el fenómeno se debilite por debajo de la intensidad de huracán este martes, pero que se mantenga como tormenta tropical cuando se mueva hacia el sur de la península de Baja California el miércoles.
El paso de Enrique mantenía activas zonas de prevención en los estados costeros y occidentales de Jalisco, Michoacán, Nayarit y Colima, con pronóstico de oleaje desde tres hasta ocho metros de altura, debido a los fuertes vientos.
El domingo, autoridades del sureño estado de Guerrero confirmaron a la AFP que un centenar de casas de los municipios empobrecidos de Copalillo y Coahuayutla de Guerrero (suroeste) perdieron sus techos de láminas por los fuertes vientos.
También reportaron casi 30 deslaves de cerros que afectaron tramos carreteros de la zona serrana.
Autoridades de Jalisco habilitaron tres albergues en comunidades costeras, mientras que en Michoacán se habilitaron siete, pero las autoridades no informaron si sus habitantes habían recurrido a dichas instalaciones.
Por su ubicación geográfica y su amplia línea costera, tanto en el Pacífico como en el Atlántico, México es uno de los países más vulnerables a sufrir el embate de fenómenos meteorológicos.
La temporada de lluvias y ciclones tropicales de 2021 comenzó el 15 de mayo pasado, y se estima que finalice en noviembre.