DANZA
Melisa Cosilión
He resguardado en la memoria
los pasos febriles de aquellas danzas,
he reservados para otros brazos
en otros labios, mis esperanzas.
Pero no puedo ya más fingir
que añoro el cálido abrazo,
que sueño despierta morenos trazos
del cuerpo desnudo
que junto a mi se apriete.
Y aunque revuelvo el pecho
de hembra inquieta,
pesado late mi pulso errado.