Mariel Turrent
Padecimientos literarios y otras afecciones
Instrucciones para lavar un poema en otoño
Lea el poema varias veces hasta memorizarlo. Asegúrese de poner especial atención en las palabras finales de cada verso y en la forma en la que han sido separados los párrafos.
Separe las palabras según su color.
Lave las más tristes con poca agua, y deje remojando las gozosas en una tina para que chapoteen con libertad. Las palabras que denoten juicios o blasfemias requerirán de un chorrito de cloro.
No tallar.
Usar únicamente detergentes biodegradables.
Enjuagar muy bien y dejar secar sobre una cuerda, idealmente de henequén, en un jardín al aire libre.
Asegúrese de que las hojas estén bien secas antes de volver a armarlo.
Recuerde el orden preciso, previamente memorizado, y no olvide colocar los espacios entre los párrafos.
Ordene y guarde cuidadosamente.
PRECAUCIÓN: Los poemas solo deben lavarse una vez al año de preferencia durante el otoño.
