VASO DE FUEGO
MELISA COSILIÓN
K.L.
Un vaso de fuego
entre este bosque
que se ilumina
una tarde de ópalo.
Entre las cuevas del este
donde palpita tu nombre
y me convoca en su canto
desde unos labios de higo.
Castillos de mejorana,
sal herida sobre la mesa:
encontrarnos diluyendo
mil siglos de ausencia.
Ombligo de fuego,
flor del corazón de la Tierra,
tu boca se expande
entre la música del universo,
y es esta bruja que canta
quien se despierta con tu conjuro
para volver a soñar primaveras.