EN MIS SEGUNDOS DE LUCIDEZ
GABRIEL AVILÉS
A PULSO DE TINTA
presagiodemar@gmail.com
En mis segundos de lucidez para no sentirme muerto,
comparto mi pobreza con vagabundos
que duermen alrededor de mis raíces,
al despertar reitero sus pesadillas y el ocio les inyecta morfina.
Abro mis ojos,
al lado de mí, depresión y muerte,
clamo por mi soberbia
aún siento la esclavitud pero me arraigo
al trágico escarlata de las horas.
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Salgo a la calles, con estos textos en mano,
el cielo se despeja con mis lágrimas
y en el parque los niños confunden mis versos con tierra.
En tanto, miro el horizonte, estoy más solo que nunca,
los cuervos reconocen la diferencia entre encono y muerte.
Comprendo que las flores fueron el presagio
que hoy me dispara a quemarropa,
baratas metáforas aún en los estiajes más indolentes.
No te culpo, las flores carnívoras parecen indefensas.
Por ello, recupero mis escamas,
la mar se asume en mí con todo y algas.
Hoy, dormiré sin prisa, sin miedo
a que el olvido me tiente
y despertaré con dos Valiums en la mano
y un vago intento por sobrevivir con whiskys y hierba.
