Alicia Machado conmocionó al mundo el 17 de mayo de 1996. Todo el continente se volcó a su favor cuando llegó a la final de Miss Universo, el certamen de belleza de mayor prestigio en el orbe. Cuando el anunciador mencionó su nombre como vencedora todo estalló: había dado un paso absoluto hacia la inmortalidad. Entre los aplausos de los espectadores y de su rival Taryn Mansell, Machado alcanzó un hito que, en la previa, no recibió ningún augurio.
Así, Alicia levantó el galardón y entró a la selecta lista de cuatro venezolanas que, hasta ese momento, habían conseguido al corona universal. Pero después de conocer el rostro del triunfo, la joven modelo de 20 años enfrentó un auténtico infierno. El responsable: Donald Trump. Propietario del concurso tras adquirir la franquicia un año antes, el magnate neoyorkino emprendió una cruzada mediática contra Alicia en los meses posteriores a su nombramiento como Miss Universo. La oriunda de Maracay fue avergonzada por Trump con palabras y actos, cuyas consecuencias fueron de largo plazo.
En 1997, Trump convocó a periodistas y fotógrafos para que dieran cuenta de una sesión en la que Machado hacía ejercicios. También le puso apodos despectivos que aludían a su físico y origen hispano: «Miss Peggy» y «Miss Housekeeping». Según contó Machado a The New York Times en 2016, esos abusos por parte de Trump la llevaron a padecer anorexia y bulimia durante cinco años. Además, tuvo que asistir a terapia psicológica a lo largo de dos décadas.
Machado conoció la personalidad privada del expresidente de Estados Unidos y certifica que en nada cambia con lo que deja ver en público. «Vivir en manos de Trump es algo que nunca lo olvidaré. Así como lo ves en los meetings, así actúa y a veces en la intimidad es peor. Es una persona que descalifica a la gente. Ahorita que soy una mujer madura, mira al pasado y me veo con mucha ternura. Yo solo me defendí de lo que podía defenderme», contó en entrevista con Yordi Rosado.
En ese momento tan complejo de su vida, Alicia recibió el apoyo de Luis Miguel, a quien ella considera un factor fundamental para lidiar con todo lo que padeció, pues fue la única persona que, a nivel personal, la acompañó en ese momento tan complejo.
«Yo tengo muy bonitos recuerdos de él, aparte de que me ayudó mucho en esa época. Cuando Trump hacía lo que hacía, pinche viejo lo odiaba, y siempre Luis Miguel me decía: ‘no, tú no estás gorda. Él es un imbécil, tú no le hagas caso’. Me daba mucho support. Entonces me encantaba andar con él por eso. Él era el único que me decía que yo no era gorda, todo el planeta me decía que yo era gorda menos Luis Miguel. Entonces creo que eso me ayudó».
Luis Miguel se flechó de Alicia justamente gracias al certamen de Miss Universo en el que ella resultó ganadora. De acuerdo con Machado, ‘El Sol’ vio la competencia desde su casa en Acapulco y después realizó algunas consultas logísticas para poder empatar su agenda con una visita sorpresa a Alicia en Los Ángeles. El fotógrafo de una sesión de Machado trabajaba también con Luismi en las fotografía de sus álbumes. «Les dijo que me quería conocer. Llegó a la sesión y nos conocimos. Me invitó a cenar y se sorprendió por mi edad (él tenía 26 años y ella, 19)», confesó a ‘Ventaneando’.
La relación se quedó formalmente en una amistad, nunca dieron el siguiente paso debido a la diferencia de edades entre ambos y que sus tiempos no solían coincidir. Sin embargo, el recuerdo es grato entre ambos. En 2019, Luis Miguel vio a Alicia en Miami y convivieron por un momento, además de que antes se habían visto en algunas alfombras rojas. «Nos encontramos una vez en unos Premios Lo Nuestro. Luego en un restaurante, él me llamó, hasta me presentó a su novia«.
En diversas ocasiones Machado ha destacado la caballerosidad que caracteriza a Luis Miguel. «No son detalles de dinero, sino de su manera de ser. De repente te manda flores, te invita a pasear en helicóptero«, dijo la actriz en ‘Hoy’. También aceptó que el cantante le dedicó la canción ‘Sueña’, que formó parte de ‘El Jorobado de Notre Dame’, una de las películas más exitosas de Disney durante los 90.
Aunque los abusos de Trump siempre fueron públicos, en 2016 el tema encontró eco en el contexto de la campaña presidencial del empresario. En el primer debate entre Hillary Clinton y Trump, realizado en septiembre de aquel año, la candidata demócrata recuperó el episodio de las humillaciones padecidas por Machado como ejemplo documentado de la misoginia de su rival. Precisamente en ese año Machado obtuvo la ciudadanía estadounidense y, desde el primer momento, manifestó su deseo de votar por el Hillary Clinton, candidata del Partido Demócrata.
«Yo fui la primera Miss Universo cuando él compró la empresa. Me gritaba todo el tiempo, fue muy humillante, me sentía como un ratón de laboratorio. Era como una especie de circo: ‘miren a la Miss Universo gorda’. A mí me costó mucho sufrimiento», contó Machado en una entrevista para el equipo de campaña de Hillary Clinton. Machado también relató que los malos tratos se extendieron al ámbito financiero, pues realizó diversas campañas publicitarias de las que debía facturar el 10% de ganancias y jamás recibió ningún pago.
En su charla con Rosado, Machado también recordó que llegó a estar secuestrada durante 25 días en una propiedad de Trump. Durante ese tiempo fue sometida a tortura psicológica. En los últimos años Machado ha mantenido una actividad constante en la televisión. Participó en la serie ‘Esta historia me suena’, en ‘La Casa de los famosos, y en las versiones mexicana y colombiana de ‘Masterchef: Celebrity’, en dónde fue una de las participantes más apoyadas por el público.
