EN LA SOLEDAD
GUILLERMO ALMADA
¿Quién sabe lo que explico?
¿Quién me impregna?
Sentado en la soledad
de la cocina bebo un café
que sabe más a tus recuerdos.
Hago lugar entre todas mis locuras
para que tomes asiento,
y miro.
Asomado a la ventana de mi patio,
a un gato que me mira adormecido y fijo,
como entendiendo.
No hay un verso que me provoque
no decir tu nombre.
Los tintes claros de este cielo,
como acuarela aguada,
se derriten,
y siento que chorrea,
pero son mis lágrimas.
Toda esta soledad inesperada,
todo este espacio tan solo mío,
tan mío,
tan solo.
Está comenzando a llover,
como te gusta,
y termino el café.
Lavo la taza,
lavo las penas,
lavo la culpa.