LAS HORMIGAS MERODEAN VIENTRE ABAJO
GABRIEL AVILÉS
A PULSO DE TINTA
presagiodemar@gmail.com
En este gélido día
Las hormigas merodean
Vientre abajo
Y persiguen el dilatar
De las horas
Húmedas casi empapadas
Por el jugueteo
De los dedos
Al transcurrir de segundos
Así, se entumen los amorfos
Cuerpos de los amantes
Cuadripléjicos
Que solo sienten el hormigueo
Por su sangre
Y el sexo duerme
En la espina dorsal del dolor
Mientras una caricia
Asemeja la picadura
De hambrientos hormigones
Mordiendo entrepiernas