¡SOY LOCO!
GUILLERMO ALMADA
¡Soy loco!
Rematadamente loco,
y lo declaro firmemente.
Loco acreditado,
con certificación.
Tengo carnet de loco.
Porque, los locos somos locos,
porque somos minoría.
Y todo aquel que no contacte,
con la realidad,
como la mayoría,
será considerado loco,
por decreto.
Pero no soy un loco criminal
como era Hitler, no.
Tampoco soy loco conquistador
o imperialista,
igual que Bonaparte.
Ni soy un loco de la guerra,
ni un loco malo.
Para nada.
Tampoco soy de atar.
Y aunque tal vez no sea,
yo, un loco creativo,
como Leonardo,
o Miguel Ángel,
y no tenga la locura
genial de Galileo,
soy un loco inofensivo,
no lastimo,
no hago daño.
Como Jesús, que también fue
considerado loco.
¿Ahí está, ven?
Yo soy un loco así,
un loco bueno,
un loco divino.
Un loco suelto
que no desea
perjudicar a nadie,
que solo pretende contagiar,
con su locura,
la alegría, la paz,
y la felicidad.
Lo que se dice
un loco lindo!
Y sí, soy loco.
Rematadamente loco.
Vivo en otra dimensión
con mi locura.
Pero no cualquiera
puede ser así de loco,
no, señor.
Esta locura, amigos míos,
no es un trastorno,
es, más bien, un atributo.
¡Hay que ganarse esta locura!
y para eso, como ya dijo don Julio,
se debe merecerla.