VERSOS DESPIADADOS
GUILLERMO ALMADA
El misterioso mercurio
penetrado, negro, grabado
sobre la pasta vasta, virgen
blanca, pura, y porosa.
Convirtiendo las palabras
en lenguaje
plagado de adverbios,
sustantivos comunes,
y, otros, no tanto.
Con algún pronombre posesivo,
obsesivo, con abuso de género.
La indulgencia de un sinónimo.
La sabiduría proverbial
de las hipérboles.
La poesía extrema.
El goce orgásmico
en Times New Roman,
tamaño catorce, pero pidiendo más,
veintiséis, veintiocho, treinta.
El logos, el sintagma,
y algún neologismo
para ser disruptivo.
Una fuerza poética capaz
de engendrar constelaciones
de versos despiadados.
Así se pare un libro,
y se presenta indemne,
junto a su contingencia,
a esperar resultados.
