Buenos Aires. Aquí estoy, pasen sobre mi cuerpo si quieren golpear a los ancianos, no me voy a mover
, gritó una mujer tendida en la calle frente a motos policiales, durante una represión cada vez más brutal de más de dos horas que dejó al menos 20 heridos, incluidos ancianos, tres niños, una adolescente, así como a periodistas y camarógrafos, en una manifestación que ayer intentó alentar a los diputados a rechazar el veto del presidente Javier Milei a la ley de movilidad jubilatoria, votada recientemente por el Congreso.
Desde temprano llegaron tres camiones hidrantes, autobombas, camiones de asalto de las fuerzas de infantería de la Policía Federal, la Prefectura, Gendarmería, Seguridad Aeroportuaria y de la motorizada de la Ciudad de Buenos Aires. Se instalaron unas vallas mucho más altas que las anteriores ante el Congreso y en las esquinas de todas las calles que dan al recinto.
La mayoría coincidía en que nunca se vio esto
, aunque hubo represiones durante el gobierno del ex presidente Mauricio Macri (2015-2019), actual asociado a la ultraderechista gobernante La Libertad Avanza y la entonces ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, quien ocupa el cargo nuevamente.
El Proyecto Antipiquetes ilegalmente aplicado por Bullrich, en realidad es un diseño israelí, en el que figuran los disparos de gas pimienta y balas de goma al rostro y a la cabeza.
Cada cartucho del gas pimienta, con una nueva composición química que puede producir graves quemaduras, cuesta 220 mil pesos argentinos, y las jubilaciones mínimas varían entre 234 y 295 mil. El Centro de Estudios Legales y Sociales advirtió que se habla de armas no letales, pero es de acuerdo con cómo se utilice
lo que determinará si es o no lo es.
También se utilizaron los bastones y escudos para empujar a los manifestantes pacíficos, pero las tres filas de uniformados, armados como para un combate, impidieron avanzar a sindicatos, como el de camioneros.
Estuvo presente en la marcha el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, y altos funcionarios de esa administración, así como intendentes, movimientos sociales y políticos, que también sufrieron los efectos del gas y algunos hasta golpes. No es un problema de si hay o no plata, sino para qué se usa y a quién se beneficia
, sostuvo Kicillof.
Lo sucedido ayer, con cuatro oleadas de represión y que está violentando a todos los sectores, es sólo por negarse a aumentar jubilaciones por 10 mil pesos, pero también impedir la movilidad, es decir, ajustar con relación a los salarios de los trabajadores sindicalizados.
Encuentro escandaloso en la Casa Rosada
Milei logró convencer
a siete diputados de la Unión Cívica Radical difundiendo una foto escandalosa del encuentro de éstos con el mandatario en la Casa Rosada. Lo mismo sucedió con otros bloques, que antes votaron en contra, ahora abiertamente comprados
, ya sea con cargos especiales o dinero. Se logró 153 a favor, 87 en contra y ocho abstenciones.
Gracias a los medios de comunicación se pudo seguir parte por parte la represión y sus consecuencias, como ver a una mujer que era asistida por los mismos manifestantes después de haber caído al suelo, con un balazo de goma en el cuello.
Rescatistas de una organización de civiles que ya han ayudado en las manifestaciones anteriores, actuaron nuevamente y hubo que trasladar a varios en ambulancia hacia los hospitales más cercanos.
Otra mujer que se puso delante de las motos fue atropellada, lo que hizo caer a los dos policías, sin ninguna consecuencias para ellos, pero sí para la mujer que quedó herida. Los uniformados intentaban encubrir estos hechos, pero la verdad fue expuesta por el valor de los periodistas, fotógrafos y camarógrafos, que también fueron gaseados y lesionados.
Juan Marino, diputado de Unión por la Patria por la provincia de Buenos Aires, pidió rechazar el veto de Milei y sostuvo que organizaciones de jubilados desde hace meses se manifiestan frente a este Congreso denunciando al gobierno, que les está imponiendo un genocidio silencioso, y a los traidores que le dan la espalda a todos ellos por cargos, promesas de fondos para sus provincias o sencillamente por afinidad política e ideológica al gobierno nacional
.
La imagen de ancianos y niños golpeados no se irá fácilmente de una población que mañana tiene otro frente: el Senado deberán votar la ley de financiamiento educativo que quiere impedir Milei y hay marchas de universitarios, docentes y sindicalistas.