En la revisión de la Cuenta Pública 2014, la Auditoría Superior de la Federación detectó que la Cámara de Diputados no cumplió con las normas de transferencia y control de recursos financieros que se asignan a los grupos parlamentarios de los recursos de una “subvención extraordinaria”.
Según el informe del órgano fiscalizador, dicha subvención extraordinaria, de donde saldría el bono secreto, que representó un pago de 250 mil pesos por cada diputado no cumple con lo que establece la Norma para Regular la Transferencia y Control de Recursos Financieros Asignados a los Grupos Parlamentarios de la Cámara de Diputados.
La Auditoría señaló que esta misma situación se observó en la revisión de la Cuenta Pública de 2013 y que persiste una limitada rendición de cuentas.
La Cámara de Diputados confirmó que los legisladores federales recibirán los 357 mil pesos que les tocan por ley y si se cristaliza un acuerdo entre los grupos parlamentarios, se les darían 150 mil pesos extras, lo que sumaría 507 mil pesos.
