En rueda de prensa realizada en conocido hotel, el diputado federal panista con licencia, Joaquín Díaz Mena anunció su renuncia a la militancia blanquiazul y su aceptación a la invitación de Andrés Manuel López Obrador para ser candidato a gobernador en el estado, como abanderado del Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA).
Díaz Mena hizo una lacrimógena retrospectiva de su llegada al blanquiazul, como consecuencia de otra rabieta, debido a que su partido de entonces, el PRI, le negase ser candidato a la alcaldía de San Felipe, su pueblo natal.
Como ha sido costumbre en los últimos días, Huacho fustigó a las directivas nacional y estatal panistas, acusándolas de antidemocráticas y traidoras, recalcando tener los merecimientos para ser candidato al senado.
En mérito de ello y subrayando que no lo mueve la ambición por los cargos y el dinero, manifestó haber aceptado la invitación de Andrés Manuel López Obrador para ser candidato externo a gobernador, pues no le parecía correcto colgar su hamaca en su casa y en el PAN le enseñaron a no arrodillarse ante nadie.
Posteriormente, Rogelio Castro ratificó lo dicho por Diaz Mena y dio a entender que el dedito del peje señaló al oriundo del puerto del oriente para llevar la estafeta de su partido, aunque haya sido perjudicado. Ya se sabe como se las gasta en su partido, el oriundo de Macuspana.
Por Dahemont
rrc