La Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada atrajo en su totalidad las pesquisas por el secuestro y muerte del sacerdote, Moisés Fabila Reyes.
Según las primeras versiones, el presbítero de la Basílica de Guadalupe habría sido secuestrado a inicio del mes.
En los hechos los plagiarios lo golpearon y el cura murió debido a un infarto al miocardio.