El Papa Francisco insistió en su apuesta por la paz en la Península Coreana, al reunirse con el presidente surcoreano Moon Jae-in en el Palacio Apostólico del Vaticano.
El Sumo Pontífice pidió al mandatario trabajar para lograr la desnuclearización de la Península y dejar atrás una etapa de violencia.
Ambos se comunicaron a través de un traductor, un sacerdote coreano.