Un ex enfermero al que le gustaba provocar paradas respiratorias a sus pacientes porque disfrutaba de la sensación de poder reanimarlos fue condenado el jueves por 85 cargos de asesinato en un tribunal del noroeste de Alemania. Se cree que es el peor asesino en serie de la historia moderna de Alemania.
Hoegel trabajó en un hospital en la ciudad noroccidental de Oldenburg entre 1999 y 2002 y en otro hospital de la cercana población de Delmenhorst entre 2003 y 2005. Los asesinatos ocurrieron entre los años 2000 y 2005, según la agencia alemana de noticias dpa. Las víctimas de Hoegel tenían entre 34 y 96 años.
Hoegel fue condenado en 2015 por dos asesinatos y dos intentos de asesinato y ya cumplía una cadena perpetua. Las penas no son acumulativas en Alemania, pero la calificación de gravedad de los crímenes en el veredicto prácticamente asegura que seguirá encarcelado más allá de la pena estándar de 15 años.
Enfermero disfrutaba la sensación de reanimar a los pacientes
En su primer juicio, el acusado dijo que había provocado crisis cardiacas de forma deliberada a unos 90 pacientes en Delmenhorst porque disfrutaba de la sensación de poder reanimarlos. Después dijo a los investigadores que también había matado pacientes en Oldenburg.
Las autoridades investigaron cientos de muertes, exhumando cuerpos de antiguos pacientes.
En total, Hoegel fue acusado de 100 delitos de asesinato, aunque el tribunal le declaró no culpable en 15 casos por falta de pruebas.
Durante los siete meses de juicio, Hoegel admitió 43 de las muertes, negó cinco y dijo que no podía recordar los otros 52.
En su alegato final al tribunal el miércoles, se mostró avergonzado y arrepentido, diciendo que se daba cuenta del dolor y el sufrimiento causados por sus “terribles acciones”.
“A todos y cada uno de ustedes les pido disculpas por todo lo que he hecho”, dijo.