Por lo menos 10 personas murieron a raíz de un incendio desatado en un hospital privado de Río de Janeiro, Brasil, que obligó a evacuar de urgencia a los pacientes ingresados.
El fuego se inició a partir de un cortocircuito en un generador de energía.
Cerca de 90 enfermos que se encontraban internados en el nosocomio fueron transferidos a otros centros médicos.