Editorial

TANATOLOGIANDO – BIOETICA Y MUERTE

TANATOLOGIANDO

LAURA SALAMANCA LOPEZ

BIOETICA Y MUERTE

 

En el siglo XII aparecen los libros relacionados con la medicina y la moral con las cuestiones médico legales del romano Zacchia (1584-1659), a finales del siglo XIII se determina el pensamiento cristiano y la elaboración laica de los deberes de médico que con el tiempo se le denomina deontología médica.

La bioética coincide con la filosofía, la ética práctica y el interés de encontrar fundamento al debate público sobre la legislación con la medicina en medio de una sociedad pluralista y democrática 

En 1946 se efectúa el Código de Núremberg a través de un juicio en contra de los nazis por crímenes de guerra en el cual son condenados 17 médicos por agresiones y atropellos cometidos por personas de todas las edades con el pretexto de una investigación; en 1947 se fijan normas éticas para la realización de las investigaciones médicas con seres humanos supone la primera internacionalización de socialización de las alertas en temas biomédicos. Sale la declaración de los derechos humanos, donde se prohíbe la esclavitud en todas sus formas, códigos de malinas que abarcan la moral internacional en 1937, relaciones sociales 1927, relaciones familiares en 1951 y el código de moral política en 1957, para hacer conciencia pública y regular el respeto al individuo, nace la OMS en 1948. Y el desarrollo de la bioética es puesto en marcha por el oncólogo Van Rensselaer Potter.

En el progreso médico se dan nuevos problemas que bajo diferentes miradas deben ser resueltos como:

Técnicas de reanimación, eliminándose el limite entre la vida y la muerte en 1953, después viene el primer trasplante de riñón en 1955 (comenzando la era de los trasplantes), en animales la fecundación in vitro en 1959, en ese mismo año se describe por primera vez el estado vegetativo, en 1960 la píldora anticonceptiva, en 1967 el primer trasplante de corazón (cabe señalar que existen dilemas médicos sobre el consentimiento del donante), en 1978 nace la primera niña resultado de fecundación in vitro (Louise Joy Brown en Gran Bretaña), ahora se lucha contra las enfermedades cardiacas.

En 1964 viene a complementar lo que ya se venia haciendo con la declaración de Helsinki, donde promueve los principios éticos para la investigación médica en seres humanos.

Actualmente se han frenado las enfermedades infecciosas, y desaparecen algunas enfermedades, mientras están apareciendo otras, existen nuevas herramientas diagnosticas, ya se puede tratar la psicosis, existen una gran variedad de anticonceptivos, pero pese a esto la sociedad carece de una cultura hacia la maternidad y mientras existen madres que no quieren a su hijo, las clínicas de fertilidad están cada vez con más demanda. Y aparecen tres grandes retos que son el control de la obesidad, la diabetes y la presión arterial.

Y aparecen dos tareas urgentes: humanizar la medicina y descubrir orientaciones y límites para la investigación de estas nuevas intervenciones biomédicas en las que intervienen los principios bioéticos que son:

Principio de autonomía (que respeta la capacidad de decisión de las personas). 

Principio de beneficencia (la obligación moral de actuar en beneficio de los otros).

Principio de no maleficencia (obligación de no hacer daño intencionalmente, no exponer a un riesgo al otro).

Principio de Justicia (dando a cada uno lo suyo, lo más útil) y donde el objetivo es llegar a brindar atención primaria a las personas, para que puedan llevar una vida social y económicamente productiva.

Es importante como se ve la muerte en México, ya que no hay una unificación por la variedad de zonas rurales, grupos indígenas, zonas urbanas y zonas marginadas donde se mezclan el culto a los muertos, lo profano, lo religioso, el respeto, la veneración, el sentido de la burla o festivo hacia la muerte, ocultando la incertidumbre, la angustia y el miedo que ella provoca.

Pero con tanta violencia que estamos viviendo en este tiempo, llega a verse la muerte como algo normal, algo que también sucede con los profesionales de la salud, por la cotidianidad con la que suceden los decesos. Aunque el termino muerte va más allá de la muerte misma, ya que no hace falta que el cuerpo deje de existir para sentirla, por la disolución de la unidad organizacional donde aparece, es esa pérdida de la capacidad para la interacción social, por los que a muchas personas se les considera como muertas antes de que realmente lo estén

Los dilemas bioéticos: la decisión en cuanto a indicación, realización y suspensión de procedimientos diagnósticos o terapéuticos en enfermos moribundos no es fácil, son decisiones que no solo corresponden al médico, ya que participan el enfermo, si esta en condiciones de conciencia y orientación, sus familiares o la persona responsable, autoridades sanitarias, civiles y/o judiciales y los comités de bioética hospitalarios, lineamientos de conducta que establecen los comités estatales y el comité internacional de bioética (CIB) los problemas que surgen de la distanasia o encarnizamiento terapéutico, la eutanasia pasiva y activa, el suicidio asistido, la ortotanasia y el trasplante de órganos, por mencionar algunos.

 

El médico que no entiende de almas no entenderá de cuerpos. (José Narosky)

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