Editorial

RADIOGRAFÍAS – Miguel León Portilla un filón en el mito de  La filosofía náhuatl

RADIOGRAFÍAS

Miguel León Portilla un filón en el mito de  La filosofía náhuatl

NORMA SALAZAR

 

Miguel León Portilla nació en la Ciudad de México el 22 de febrero de 1926 fallece el 1 de octubre de 2019. Sus primeros estudios los realizó en el Colegio de México y los concluye en  la ciudad de Guadalajara, tiempo después  estudia en la Universidad de Loyola de los Ángeles obtuvo el grado en Artes en 1951. En la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México cursó el doctorado y se tituló con la tesis La filosofía náhuatl su maestro y asesor fue el lingüista, traductor, poeta y sacerdote católico Ángel María Garibay Kintana, Cargos académicos; maestro de la Facultad de Filosofía y Letras-UNAM (1957 hasta su deceso), Miembro de número de la Academia Mexicana de la Lengua, Director del Instituto Indigenista Interamericano (1960-1966), Director de Instituto de Investigaciones Históricas-UNAM (1966-1976), Miembro de El Colegio Nacional (1971), Miembro de la Junta de Gobierno de la Máxima Casa de Estudios (1976-1986), Investigador emérito por la UNAM (1988) Sus principales investigaciones acentuadas en las culturas prehispánicas del centro de México, lengua y literatura náhuatl, los códices, etnohistoria de Baja California, defensa  de los derechos indígenas. Innumerables Premios, Reconocimientos a nivel nacional e internacional.

Algunos libros relevantes de su vasta obra  son La filosofía náhuatl (1956), Visión de los vencidos (1959), Los antiguos mexicanos a través de sus crónicas y cantares (1961), Tiempo y realidad en el pensamiento maya (1968), Cartografía y crónicas de Antigua California (1989) Un preámbulo a su acentuada labor humanística.

¿Cómo explicó los mitos nahuas a través de sus investigaciones y observaciones el doctor Miguel León Portilla?

La interpretación del mito en La filosofía náhuatl que observó el doctor León Portilla a través de fue a una reflexión analítica del inicio del hombre y el sentido de sus coexistencia, expuso lo que los tlamatinime cavilaron sobre el hombre: un escenario que tiene un principio, la explicación sobre el comienzo; el mito y el cual el doctor León Portilla acentúa como filosófico, para ello aporta narraciones sobre el umbral del hombre en la primera edad del mundo; asentada en mitos relevantes que puntualizan la creación de la primera humanidad. Tal es el caso, la narración del peligroso viaje de Quetzalcóatl al Mictlan subrayado en el Manuscrito de 1558 o La Leyenda de los Soles, es aquí, un primer razonamiento del mito que condujo de una facultad filosófica conexa al origen del  hombre.  Éste manuscrito relata que posteriormente de haber creado al Quinto Sol, los dioses se percataron de la contra parte, quién habitaría en la tierra. Quetzalcóatl viaja al Mictlan para encontrar los huesos agraciados para crear la nueva humanidad. De nuevo esta en la mira con las narraciones e interpreta el filósofo León Portilla  la doble faz de Ometéotl que mora en el inframundo encarnado por Mictlantecuhtli y Mictlancíhuatl, señor y señora del territorio de los muertos. Los señores del inframundo tras ser sometidos por el temerario Quetzalcóatl los obligó a varias pruebas, y  entregan los huesos preciados, aquí, el maestro León Poetilla resalta que existe en primer lugar; un principio de supremacía y una batalla de fuerzas en pro y en contra por la aparición de nuevos hombres.

Dichas pruebas, manifiestan un destino dialéctico que se expande en el seno de la divinidad ante la idea de la creación de la humanidad,  no debemos dejar de lado que la historiografía es tocante a una exégesis de los mitos cosmogónicos, sólo en la prefiguración metafórica; el temple del origen e integrante del universo.

 La filosofía náhuatl desde su primera aparición en el año 1956 es un referente entre sus lectores y en el ámbito académico nacional e internacional, el interés de investigación se canaliza particularmente en la interpretación del mito, es decir, la interpretación de los mitos cosmogónicos: Aquellas fuerzas de la creación y constitutivas que rigen el universo, a manera de símil con los dioses hijos o desdoblamientos de Ometéotl, por otro lado, es muy importante no dejar de lado que no existe una historiografía mexicana que aproxima la interpretación del mito en Mesoamérica donde se dan reflexiones propias de los mitos en toda la obra.

El investigador emérito con su obra escribe con fundamento la necesidad  gradual que transfiere a un razonamiento filosófico. Los dioses que combaten personifican los cuatro elementos primordiales: tierra, aire, fuego y agua son estas divinidades combatientes que pretenden regir o dominar, armonizar el universo y en el lapso de éstas batallas  van aconteciendo las varias edades del  mundo. Asimismo, los mitos enuncian la temporalidad de ciclos en el universo aunado en cuadrantes y una lucha  para deliberar el acaecer cósmico.

Otro destacado investigador, el doctor Alfredo López Austin explica su postura referente a la especificación de la divinidad encuentra un animismo convenido, es decir, un conjunto de consideraciones y reflexiones en torno a  primordiales bases del conocimiento, ideología y acciones humanas, compuesto en un método. Los dioses creadores se abrigan de materia visible para transformarse en sus adecuadas criaturas, personificadas en cada planta, animal, roca y astro un dios recluido, las deidades serían incontables y desiguales como disímiles y múltiples en el cosmos, por ello, los dioses adquieren una naturaleza compleja y extraordinaria.

 

            “un dios puede dividirse separando sus atributos, para dar lugar a dos o más

                  dioses diferentes, en ocasiones hasta opuestos […] varios dioses pueden fundirse

                  para formar una sola divinidad […] pueden fragmentarse y ocupar dos o más

                  sitios diferentes, incluso multiplicando su presencia sobre la tierra,  y cada uno

                  de estos fragmentos está en comunicación con el resto y puede retornar a su fuente”

En conclusión ávidos lectores para el doctor López Austin el mito cosmogónico concerniente con los cinco soles y que sobresale con la muerte de todos los dioses que colaboraron en la causa de la creación, no es más que el transcurso de metamorfosis de los creadores en criaturas, término amables lectores se trata de la reprobación del Padre y la Madre que sentenciaron a sus hijos, este fue el sometimiento al ciclo de la vida y de la muerte, la doble casa sobre la superficie de la tierra y el inframundo. Hombres y dioses se hallaban sumidos en una relación simbiótica donde éstos últimos demandaban reconocimiento, acatamiento, cumplimiento, devoción y ofrendas, los dioses podía fenecer si no eran servidos.

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