El Comando Central de Estados Unidos informó que 11 soldados estadunidenses resultaron heridos tras el ataque de Irán a una base aérea de Irak ocurrido a principios de mes.
Detalló que algunos de los lesionados fueron trasladados a hospitales de Alemania, mientras que otros fueron enviados a Kuwait, para una evaluación de seguimiento.
Cuando ocurrió la agresión, el presidente estadunidense Donald Trump afirmó que no se habían producido daños ni lesionados.