Más de 30 usuarias del Centro de Justicia para las Mujeres (CJM) de la Fiscalía General del Estado (FGE) que trabajan por su cuenta, concluyeron el programa “Mujeres descubriendo su potencial” que, con el respaldo del Gobernador Mauricio Vila Dosal, fue impartido desde noviembre pasado.
A pocos días de concluir su capacitación, las participantes agradecieron la ayuda para superar sus problemas jurídicos, así como el obtener herramientas para mejorar sus finanzas y la de sus familias, estrategia que es impulsada por el titular de la dependencia, Wilbert Cetina Arjona, con el objetivo de que dejen atrás la violencia y se empoderen en lo económico.
De esta forma, el esquema apoya a mujeres atendidas en el Centro y que tienen negocios de comida, repostería, que elaboran jabones, manualidades artesanales y pequeños salones de belleza, entre otros giros, a conocer experiencias para salir adelante en esta nueva etapa de sus vidas.
Cabe señalar que, como parte de esta capacitación, con duración de 48 horas, las participantes abordaron temas de iniciativa personal, servicio al cliente, prevención de la violencia hacia las niñas y mujeres, desarrollo de habilidades empresariales y el modelo Canvas.
“El éxito del proyecto Ven, Inspírate y Vende (VIVE) de la organización The Trust for the Americas que por primera vez se impartió en el Centro, nos motiva a continuar impulsándolo este 2020 y a mantener los lazos de colaboración para seguir realizando actividades a favor de las mujeres”, expresó la directora del CJM, Patricia Gamboa Wong.
La funcionaria estatal señaló que debe ser motivo de orgullo el haber concluido este programa, pues además de la satisfacción personal, se llevan experiencias que seguramente atraerán otros logros.
La instrucción estuvo a cargo de la especialista de VIVE, Nayeli Hernández Crespo, quien se dijo entusiasmada por la respuesta del grupo, al que calificó de participativo, dinámico y de mucho liderazgo, por lo que ya se tiene en la mira próximas vinculaciones más especializadas.
Hernández Crespo destacó que la lucha continua de las mujeres por ser mejores ha llevado a que VIVE cuente con más de 45 mil beneficiarias a nivel nacional y cerca de 400 en Yucatán.
Ejemplo de lo vivido durante el curso fue una usuaria que, tras su divorcio y la incertidumbre de su independencia, abrió una cocina económica que sólo era atendida por ella y estaba a punto de cerrar. Ella compartió su testimonio y agradeció la ayuda, pues le permitirá continuar con su negocio con los nuevos conocimientos.
Otras mujeres también tuvieron oportunidad de hablar de sus experiencias y, además del agradecimiento, muchas de ellas coincidieron en que los saberes adquiridos les ayudarán a redireccionar sus establecimientos y a tener una mejor organización de los mismos.