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Pobreza laboral disminuye solo en seis estados

Si bien el impacto generalizado de la emergencia sanitaria y las medidas adoptadas para mitigar la contingencia por el COVID-19 contrajeron la economía nacional y, por ende, aumentaron los índices de pobreza laboral a nivel nacional, seis estados lograron disminuir este indicador en el primer trimestre del 2021.

Estas entidades que consiguieron descender el porcentaje de la población con un ingreso laboral inferior al valor de la canasta alimentaria, en comparación con los resultados de los primeros tres meses del 2020, fueron: Campeche (pasó de 40.9 a 40.7%, -0.1 puntos porcentuales), Tamaulipas (de 32.4 a 31.9%, -0.5 puntos), Oaxaca (de 57.3 a 55.8%, -1.4), Chiapas (de 66.7 a 65.1%, -1.6), Nayarit (de 30.8 a 27.1%, -3.6) y Zacatecas (de 46.4 a 42.7%, -3.8 puntos porcentuales).

De acuerdo con datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), la pobreza laboral, definida como el porcentaje de la población que no puede adquirir la canasta alimentaria con su ingreso laboral, aumentó 3.8 puntos porcentuales en el país, al pasar de 35.6 a 39.4% entre el primer trimestre del 2020 e igual periodo del año en curso.

Entre los factores que explican el incremento anual de la pobreza laboral se encuentran la disminución anual de 4.8% en el ingreso laboral real y el aumento de las líneas de pobreza extrema por ingresos (valor monetario de la canasta alimentaria), de 3.7% en zonas urbanas y de 4.0% en zonas rurales”, detalló el Coneval.

En ingreso laboral per cápita, nueve entidades mostraron incrementos (se encuentran las seis que disminuyeron su pobreza laboral): Nayarit (19.0% a tasa anual real), Zacatecas (7.1%), Oaxaca (4.2%), Chiapas (2.7%), Campeche (1.1%), Jalisco (0.9%), Morelos (0.7%), Veracruz (0.6%) y Tamaulipas (0.2 por ciento).

Se observa que a pesar de que Jalisco, Morelos y Veracruz incrementaron este indicador, fue insuficiente para evitar el alza en su pobreza laboral.

Desde otra perspectiva, la pobreza laboral aumentó en 26 de las 32 entidades.

El mayor ascenso se produjo en la Ciudad de México, que ha sido el territorio más castigado por la pandemia (obtuvo la mayor pérdida de empleos formales entre marzo del 2020 y abril del 2021, con 230 mil 901 despidos acumulados.

Además presentó la tercera caída más pronunciada de la actividad económica en el último trimestre del año pasado, con -9.0% anual desestacionalizada, y registró la mayor disminución en ingreso laboral per cápita en el primer trimestre del 2021, con -20.3% anual real).

La pobreza laboral de la capital del país pasó de 28.3% en los primeros tres meses del 2020 a 43.2% en el mismo lapso de este año, es decir, un crecimiento de 14.9 puntos porcentuales.

Le siguieron Quintana Roo (de 27.2 a 37.3%, +10.1 puntos), Baja California Sur (de 16.2 a 24.6%, +8.3) y Tabasco (de 39.1 a 46.2%, +7.1 puntos porcentuales).

En tanto, los estados en lo que se presentó el mayor porcentaje de la población que no puede adquirir la canasta alimentaria con su ingreso laboral se ubican en todo el ancho del país.

Algunos de estos estados fueron Chiapas (65.1% en esta condición), Guerrero (57.5%) y Oaxaca (55.8%), mientras las menores relaciones se dieron en Nuevo León (22.2%), Jalisco (24.5%) además de Baja California Sur (24.6 por ciento).

Contexto

Por la emergencia sanitaria derivada del virus SARS-CoV-2 en México, se estableció la suspensión de actividades no esenciales en marzo del 2020.

Debido a que a finales de 2020 se observó un aumento en el número de casos por COVID-19, el número de entidades en semáforo rojo pasó de tres en la última semana de diciembre del 2020 a diez a finales de enero de 2021, lo cual afectó la reapertura que se venía dando.

Ya en la última semana de febrero del 2021 ninguna entidad presentaba semáforo rojo por COVID–19.

“El impacto generalizado de la emergencia sanitaria y las medidas adoptadas para mitigar la contingencia provocaron la contracción de la economía”, detalla el Coneval.

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