RADIOGRAFíAS
Lourdes Grobet y su versatilidad fotográfica
NORMA SALAZAR
En los bullicios de los cuadriláteros, adonde compartió santiamenes de adrenalina laboral e intensa relación con los más selectos luchadores en la Catedral de la Lucha Libre de México uno de los deportes más populares de la época Lourdes Grobet deja una vasta obra plástica con realidades disimiles con el entorno, captó a través de su lente óptico hazañas osadas de los íconos del cuadrilátero para inmortalizarlos con sus fotografías en ambos bandos técnicos y rudos en diferentes arenas del país y más allá de las fronteras.
Por otro lado, Grobet una fotógrafa que marcó la experimentación en diapositivas infrarrojo a blanco y negro, sus estéticas bien marcadas y de culto, llevó a la fotografía callejera más dinámica con finas texturas y narrativas intrigantes. Realizó un trabajo artístico muy posmoderno de aquellos momentos en su labor profesional, al límite confrontó el trabajo fotográfico clásico con su excepcional lenguaje visual innovador muy fresco.
Diría Marshall Mc Luhan “en la era de los medios masivos se planteaban retos técnicos y argumentativos al fusionar la tecnología con las artes”, Grobet en su trabajo ejecutó una nueva mutación permitiendo introducir otras herramientas visuales para no mostrar una fotografía asentada, al contrario, hacerla más viva con movimiento para el espectador. Performances de teatro, danza y video auxiliaron bastante al arte fotográfico, en el año 1977 realiza en London, England un performance bajo el título Walking Exhibition un trabajo muy interesante porque ella es un elemento relevante adentro del espacio humano en dicho performance nos da un nuevo mensaje conceptual. La artista visual estaría de acuerdo como afirmó Charlotte Cotton
“El acto de la creación artística comienza mucho antes de que la cámara esté en posición y se fijen las imágenes, planeación de la idea. Muchos de los trabajos aquí comparten del performance y el body art, pero el observador no es testigo directo del acto físico, como ocurre en el performance, a quien se le presenta una fotografía como la obra de arte”
Prosigamos amable lector redescubriendo la obra plástica de una gran mujer, como lo fue Lourdes Grobet; Neo Kitsch digital en sus paisajes hace ejercicios intervenidos con una primera foto develada pinta y recrea un nuevo cuadro fotográfico con nuevos elementos.
Es interminable el trabajo que efectuó Lourdes Grobet en el ámbito de las artes, otra de sus cualidades artísticas se localiza en el rubro de las artes escénicas. Para nuestra fotógrafa
“El trabajo del Teatro Campesino me permitió conocer el México rural”, ella mostró el rostro, es decir, sus caras puras a través de su cámara exhibió un mundo heterogéneo de las etnias, a su vez complejo por todo lo que implica cada cultura entre las comunidades. Existen muchos rompecabezas de orden social, geográfico, cultural, económico, tradicional, religioso, etcétera. Sí, Lourdes Grobet expuso un mundo multicultural para quitarnos la veleta de nuestros ojos solo con mirar, contemplar sus fotografías entendemos su lenguaje visual. Su personaje representa la realidad con directrices contra puestas de las etnias mexicanas.
Termino ávidos lectores deseo que se introduzcan en el mundo visual de Lourdes Grobet, sus fotografías son mensajes para reflexionar, precisos del acontecer cotidiano de muchos México sin perder de vista las diversas épocas que tienen su propia historia.
Abrazo solidario a su familia, amigos cercanos, generaciones que apoyó con sus trabajos, impulsándolos y creer en ellos mismos. Gracias Lourdes Grobet