La Oficina de Derechos Humanos defendió su informe sobre el caso Ayotzinapa, y reiteró que existen indicios de tortura entre las personas que fueron detenidas como parte de las investigaciones.
La Organización reafirmó la metodología de sus investigaciones y los hallazgos del informe publicado el pasado 15 de marzo.
La ONU insistó en que estas violaciones contra 34 detenidos fueron indebidamente investigados, y encubiertos.
El gobierno de México ha rechazado los resultados del informe, al señalar que aplicaron el Protocolo de Estambul y sus resultados no demuestran tortura.
