ANOCHE
MELISA COSILIÓN
Anoche te ocultaste bañado por la oscuridad,
tu pecho y tu vientre convertidos en selva,
descubriendo su verdad fotosintética
para mis ojos.
Soy testigo de que no solamente
es posible trascender barreras de tiempo,
aún amplias líneas kilométricas, senderos
de banderas anchas y rotas se vuelven nada
cuando nos vemos.
Presiento el calor de tu cuerpo aún a la distancia,
sueño tu piel habitándome en cada rincón
que había reservado de los ojos del Mundo.
Esta noche me envuelvo en la poderosa luz lunar,
abrazando la magia que otorga a sus hijos, la primavera
y los nuevos comienzos.
Igual que anoche: aquí te espero.