El Grupo de Lima, integrado por 14 países, entre ellos México, no reconoce la legitimidad del proceso electoral desarrollado en Venezuela, por no cumplir con los estándares internacionales de un proceso democrático, libre, justo y transparente.
Los integrantes de Grupo Lima acordaron reducir el nivel de sus relaciones diplomáticas con Venezuela y llamar a consulta a sus embajadores en Caracas.
Los países expresaron su preocupación por la profunda crisis política, económica, social y humanitaria que ha deteriorado la vida en Venezuela, la cual, indicaron, se ve reflejada en la migración masiva de venezolanos en difíciles condiciones.
