La policía de Filipinas elevó la alerta por terrorismo tras el atentado registrado en una iglesia católica en Jolo, reivindicado por el grupo Estado Islámico y que causó 20 muertos y un centenar de heridos.
Este domingo, dos bombas explotaron con quince segundos de diferencia durante la misa en el interior y exterior de la catedral Nuestra Señora de Monte Carmelo de Jolo, capital de la provincia de Sulu, en la región de mayoría musulmana del sur del país.