La Comisión de Quejas y Denuncias del Instituto Nacional Electoral ordenó a cuatro empresas que realizan propaganda mediante llamadas telefónicas, que suspendan esas operaciones.
En la resolución, el INE explicó que estas compañías no fueron contratadas por ningún partido político, sino que utilizan su derecho a la libertad de expresión para hacer propaganda contra candidatos.
A pesar de que las empresas aseguraron que ya detuvieron sus actividades, el INE constató que aún se están recibiendo las llamadas en los hogares de los votantes.
